La sequía en el estado obliga a medidas para controlar el consumo del vital líquido que afectará a millones de personas. Las restricciones que comienzan este miércoles, se controlarán a través de medidores y podrán generar multas de hasta 2,000 dólares. Sin embargo, estas podrían ser el principio de una serie de cambios que eventualmente afectarán el consumo personal de los residentes del estado.