En el sur de California se han detectado alrededor de 300 fallas geológicas de consideración, de las cuales cuatro son las que se mueven más rápido y por ello las de mayor riesgo: San Andrés, San Jacinto, Imperial y Elsinore, todas con actividad en el sur del estado y en alguna de las cuales podría generarse un gran terremoto o el llamado 'Big One'.