Los padres de Sebastián recibieron en 2014 el diagnóstico de que su hijo de 6 años sufría de un tumor cerebral llamado meduloblastoma. Los síntomas se manifestaron con fuertes dolores de cabeza que finalmente revelaron un cuadro médico que ningún padre desearía escuchar.
Niño con agresivo cáncer cerebral se recupera tras intensos tratamientos
Los padres de Sebastián recibieron la devastadora noticia cuando su hijo tenía solo 6 años, pero la alegría y el optimismo de este pequeño luchador le han permitido superar esta dura prueba.

La noticia fue devastadora, cuenta su madre María Belén, "cuando me dieron los resultados del tipo de tumor que tenía, el doctor me dijo que el único tratamiento que existía estaba en St. Jude". El personal médico los guió "en este camino tan difícil que es para un padre desde el principio". Los médicos enviaron a Sebastián a Saint Jude para recibir su tratamiento y cuidado médico especializado.
El camino no fue fácil, cuenta María Belén, sin embargo, a pesar del dolor de ver a su hijo en esas condiciones el sentirse guiada por especialistas de St. Jude Children's Research Hospital fue para ella una seguridad. "Nosotros llegamos confundidos, habíamos llevado en nuestras dos maletas nuestra vida porque pensamos que nos tocaba ir a vivir allá y cuando llegamos ellos nos explicaron todo y todo lo que iban a hacer por Sebastián. Entonces estábamos confiados de que todo iba a estar bien", afirma.
La experiencia "no fue tan mala", cuanta Sebastián "porque mis papás no me dijeron que tenía un tumor, sino que iba a ser una aventura. Me dijeron que íbamos a hacer algo nuevo para ayudar el dolor de la cabeza". Además, con alegría Sebastián dijo "bueno que no me duela, estoy bien ahí".
Sebastián, ahora ha superado una etapa de su tratamiento y se encuentra en período de remisión. Actualmente hace parte de un equipo de fútbol "y soy el mejor", además, sueña en grande y dice que le gustaría estudiar y ser un ingeniero.
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