Miles de personas salieron a las calles en varias ciudades de California este fin de semana para manifestarse en contra de la violencia generada por grupos de supremacistas blancos, después de que el sábado una marcha ultranacionalista en Charlottesvile (Virginia) terminara en un enfrentamiento a golpes con un grupo de opositores al movimiento. Tres personas murieron y otras 35 resultaron heridas en distintos incidentes.