La liposucción que mató a Irma en Tijuana la realizó un falso cirujano, alegan grupos de médicos

Las autoridades mexicanas ya investigan este caso. El doctor acusado habría violado una ley del estado de Baja California, la cual establece que solo los cirujanos pueden realizar liposucciones.

Video "No nos dijeron qué pasó con ella": familiar de hispana que murió durante liposucción en Tijuana

LOS ÁNGELES, California.- Dos organizaciones de médicos mexicanos aseguran que el doctor de Tijuana que le practicó una liposucción a Irma Sanz, cuyas complicaciones le habrían causado la muerte, no tiene entrenamiento como cirujano plástico, ni está registrado como especialista en sus grupos.

Sanz, quien vivía en Los Ángeles, California, falleció el 11 de noviembre en un hospital de Chula Vista, dos semanas después de que el doctor Guillermo Díaz Vergara le realizara una liposucción en su clínica, Embellécete Grupo de Cirugía Estética, ubicada cerca de la frontera entre Tijuana y San Diego.

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Pero el Colegio Médico de Tijuana, la principal asociación médica de esa ciudad, y el grupo Cirujanos Plásticos, Estéticos y Reconstructivos de Baja California (CCPER), que verifica la certificación de sus miembros en ese estado, han cuestionado las credenciales de Díaz Vergara.

Una ley del estado de Baja California, la única en su tipo en todo México, establece que solo los cirujanos plásticos están certificados para realizar liposucciones y otras cirugías estéticas. Dicha legislación entró en vigor en octubre de 2014 para evitar las operaciones irregulares.

“Los únicos que pueden realizar la liposucción son los cirujanos plásticos que han obtenido un diploma en la especialidad”, dijo Javier García, presidente del CCPPER, al diario San Diego-Union Tribune.

Por su parte, Enrique Schulz, presidente del Colegio Médico de Tijuana, señaló que los pseudo-cirujanos, que son llamados ‘cosmetólogos’, han sacado provecho de la creciente industria médica en esa ciudad. “El problema es que muchas veces los pacientes no quieren pagar por un cirujano plástico y van a una cosmetóloga, que a menudo hace un trabajo muy malo”, advirtió.

La información académica de Díaz Vergara indica que obtuvo un título médico en 2006 en la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), una maestría en “cirugía estética” en 2012 y que acudió a distintos cursos en México y Estados Unidos. El doctor no ha devuelto las llamadas ni los mensajes enviados por Univision Noticias pidiéndole un comentario. La página de Facebook de su clínica ha sido eliminada.

La Secretaría de Salud de Baja California indicó que está al tanto de la muerte de Sanz y por ello envió a un grupo de inspectores para revisar “las instalaciones médicas involucradas en este caso”, con el fin de garantizar que cumpla con los estándares legales.

Piden cárcel para doctor

David Reynoso, sobrino de Sanz, se sorprendió al enterarse que el doctor que operó a su familiar no tenía el entrenamiento adecuado para realizar una liposucción. “Ahora se explica por qué pasó lo que pasó”, dijo a Univision Noticias.

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“Ya no se puede hacer nada por ella, pero sí pedir justicia y que a ese doctor lo metan a la cárcel por lo que hizo”, agregó.

Sanz, de 51 años, optó por un hospital al otro lado de la frontera porque le ofreció un precio más bajo que en California, según sus familiares. Ella se enteró de la clínica Embellécete a través de Facebook y en secreto hizo los arreglos para llegar al centro el pasado 27 de octubre. La llevó un chofer de Uber, a quien le dejó el teléfono de su exnovio en caso de que algo malo pasara.

Cuando sus familiares llegaron a Tijuana, Sanz seguía en estado de coma en el área de cuidados intensivos del Hospital Arcángeles. Posteriormente, los familiares trasladaron a la mujer a la clínica Sharp en Chula Vista, en el sur del condado de San Diego, el 30 de octubre. Ahí les dijeron que el daño que habría sufrido su pariente era irreversible. El 11 de noviembre se les informó que ella había sufrido un daño cerebral; ese día la la familia decidió desconectarle el respirador artificial.

“Yo le diría a la gente que piense antes de hacer algo así (viajar a Tijuana para una cirugía estética), que hagan una investigación de los doctores”, dijo Reynoso.

La familia ya ha hecho los arreglos para que Sanz, cuyo cadáver aún se encuentra en San Diego, sea velada en Los Ángeles el 1 de diciembre y que la sepulten un día después. Los resultados de su autopsia aún no han sido publicados.

Sanz nació en El Paso, Texas, y pasó casi toda su vida en la ciudad de Downey, en el sureste de Los Ángeles. Era divorciada y no tuvo hijos. Se dedicaba a cuidar a su madre de 99 años y a los animales que rescataba. Quienes la conocieron la describen como una mujer "fuerte, independiente y de buen corazón". Su carácter alegre era un imán de reuniones en su casa. Era el alma de las fiestas, según cuentan.

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A lo largo de los años, la prensa ha reportado distintas muertes de mujeres que recibieron procedimientos clínicos en Baja California. No hay estadísticas oficiales sobre estos decesos.

Cada año, Baja California recibe alrededor de un millón de estadounidenses que buscan atención de la salud y medicinas. Se estima que el 85% de los 'turistas médicos’ de Tijuana son californianos.