Hijos de migrantes salen a las calles de Los Angeles a manifestarse por los derechos de sus papás

Tras ocho días consecutivos de protestas en Los Angeles, contra los operativos migratorios emprendidos por la administración Trump, personas de todas las edades han salido a manifestar su descontento.

Pero algo que se destacó este viernes en las calles de la ciudad, son las caras y voces jóvenes que se levantan en representación de sus padres y abuelos, quienes no han logrado tener un estatus legal en EE. UU, a pesar de haber vivido decenas de años en el país.

Durante las protestas en contra de los operativos de ICE no es extraño encontrar familias con hijos o sobrinos menores.

“Para que sepan sus raíces, de dónde vinieron sus abuelos, ellos hicieron mucho, para que ellos tengan la vida que tienen hoy”, dijo Martha Gracia, quien salió a protestar junto a su familia contra los operativos de ICE.

Los jóvenes ondeaban las banderas de los países de origen de sus padres, manifestando que eran la voz que sus padres no pueden levantar.

“Ellos vinieron aquí para darnos una buena vida, nosotros no más lo que podemos hacer es luchar y hacer todo lo posible para que ellos puedan estar bien”, dijo Natalia Manríquez, quien salió a protestar por los derechos de sus padres.

Por su parte, Magaly Cielo, quien también salió a manifestarse por los derechos de sus papás, dijo que “ ellos siempre me han apoyado desde que yo era chiquita, y vinieron aquí para darme un buen futuro”.

Hay quienes piensan que estos jóvenes, hijos de padres indocumentados, una vez que cumplan 21 años, podrían reclamar a sus progenitores y arreglar así su situación migratoria.

“ Es uno de los mitos más grandes en la comunidad indocumentada, si fuera cierto que un hijo de 21 años pudiera arreglarle (la situación migratoria) a sus papás, no tuviéramos 20 millones de indocumentados”, dijo Álex Gálvez, abogado de inmigración.

Otros jóvenes dicen que están conscientes de que presentarse a las manifestaciones no es la única forma de apoyar a sus padres indocumentados, que tanto sacrificio han hecho.

“Muchos niños, muchos jóvenes de padres descendientes de inmigrantes están yendo a las universidades, esa es una forma de ayudar, porque con educación y con ese diploma les podemos ayudar”, dijo Óscar Gutiérrez, otro de los jóvenes manifestantes.

Por su parte, Jovana, quien también salió a protestar por los derechos de sus padres, señaló que en el momento en que los descendientes de migrantes caminan a recibir ese diploma universitario, “también estamos caminando con nuestros papás”.

Muchos de estos jóvenes también señalaron que se quieren convertir en abogados, para conocer las leyes y así poder ayudar a su comunidad.