HOUSTON, Texas- Texas ha dado un paso decisivo en la protección de sus estudiantes con la entrada en vigor de la Ley HB 549, también conocida como la Ley Westyn Bryan Mandrell.
¿De qué trata la Ley HB 549 y cómo busca garantizar que ningún niño muera atragantado en una escuela de Texas?
La Ley HB 549, también conocida como la Ley Westyn Bryan Mandrell, exige que todos los distritos escolares públicos del estado instalen dispositivos no invasivos diseñados para despejar las vías respiratorias en caso de atragantamiento o asfixia en los estudiantes.

Esta legislación exige que todos los distritos escolares públicos del estado instalen dispositivos no invasivos diseñados para despejar las vías respiratorias en caso de atragantamiento o asfixia, una respuesta directa al aumento de incidentes que pueden ocurrir en cualquier momento, especialmente entre niños en edad escolar.

Eren Rivera: murió asfixiado en su escuela
Como fue el caso del niño Eren Rivera, de 7 años, quien acudía a la Escuela Primaria Epps Island del Distrito Escolar Independiente de Klein.
El menor de edad murió el 24 de febrero en elinterior de su escuela y el médico forense del condado de Harris confirmó que el niño murió a causa de asfixia debido a la obstrucción del sistema respiratorio por un alimento.
El dispositivo será obligatorio en todas las escuelas
A partir de este ciclo escolar 2025-2026, será obligatorio que cada plantel cuente con al menos un dispositivo de este tipo, como los populares LifeVac, i nstalados en áreas donde los estudiantes consumen alimentos, principalmente las cafeterías.
Los distritos podrán obtener estos equipos a través de donaciones o fondos específicos, lo que evita cargas económicas adicionales para las escuelas. Además, la ley estipula que al menos un empleado debe estar capacitado para operar dichos aparatos durante los momentos en que haya un número considerable de alumnos en la zona.
El doctor Anthony Arredondo, pediatra de emergencias en Texas Children’s Hospital, resalta la importancia de actuar con rapidez en estos casos: " Es importante actuar rápido, porque cuanto más tiempo se pasa sin oxígeno, más grave puede ser el desenlace".
Por su parte, el doctor Joseph Varon, presidente de la asociación independiente de médicos, menciona: "Cada minuto cuenta, cada minuto se pierden millones de neuronas. El tiempo de respuesta es determinante: tenemos de cuatro a cinco minutos para intervenir antes de que ocurra la muerte".
Cómo nació esta Ley de Texas
La motivación detrás de la ley está vinculada al caso de Westyn Bryan Mandrell, cuya trágica muerte por atragantamiento inspiró este esfuerzo legislativo. Arthur Lih, creador de LifeVac, señaló: "Estoy orgulloso de que Texas cuenta ya con esta ley, ahora podemos salvar más vidas. Así como tenemos extinguidores, debemos tener estos dispositivos a la mano".
Desde el punto de vista legal, la ley incluye protecciones para las escuelas y su personal: establece inmunidad frente a posibles demandas si, pese a los esfuerzos y uso de los dispositivos, no se logra salvar a una persona.
Algunos distritos, como Fort Bend ISD, han comenzado a instalar los dispositivos y capacitar a su personal: “Serán colocados en la cafetería para garantizar una respuesta rápida en caso de obstrucción de las vías respiratorias. El personal recibirá capacitación para operarlos de forma segura y eficaz”.
A pesar de los esfuerzos de Univision 45, no fue posible obtener declaraciones de los representantes estatales que impulsaron la ley.







