Las altas temperaturas pueden ser más dañinas para los niños, pues según el doctor Ilan Shapiro, el cuerpo de los más pequeños “no se acopla tan rápidamente a estos cambios fuertes y la deshidratación es mucho más rápida”. Al respecto, expertos comparten cinco recomendaciones a los padres de familia que llevan a los menores a parques, entre ellas, aplicarles bloqueador, verificar la temperatura del área de juego y tocar las superficies donde jugarán los niños.