HOUSTON, Texas. – Patricia Lizeth Osorto, abuela de Josué y Jefferson Pérez, los gemelos de 13 años que desaparecieron en Galveston el pasado domingo, cuando visitaban la playa por primera vez, se arrepiente de haberlos enviado desde Honduras al reencuentro con su madre.
"Gran error el mío": abuela de los gemelos ahogados en Galveston se arrepiente en Honduras de enviarlos con su mamá
Patricia Lizeth Osorto, abuela de Josué y Jefferson Pérez, habló con Univision 45 sobre los gemelos que crecieron con ella y salieron de Honduras el año pasado para reunirse con madre en noviembre de 2022. Los cuerpos de los dos menores fueron recuperados en las playas de Galveston tras haber sido reportados como desaparecidos.

Así lo confiesa Osorto, entre lágrimas, en entrevista con Univision 45 desde su tierra, a donde busca sean repatriados los cadáveres de los gemelos Pérez, que asegura crió como si fueran sus hijos.
Aunque el domingo nadie los vio sumergirse, se sospechaba que habían muerto en el agua.
El martes, las autoridades recuperaron uno de los cuerpos y este jueves la Patrulla de Playas de la isla confirmó el hallazgo del segundo.
Abuela de Josué y Jefferson Pérez atribuye sus muertes a
"un descuido"
Los gemelos Pérez crecieron en Honduras al lado de su abuela Patricia Lizet Osorto. Hace cuatro meses viajaron a Estados Unidos para reencontrarse con su madre.
Osorto asegura que no podía impedirlo. “Qué se iba a hacer, ella era la mamá biológica. Ella los parió y sentía deseos de convivir con ellos, de saber quiénes eran ellos. Lo mismo los niños, tenían curiosidad de conocerla a ella”, explica a Univision 45.
Aunque está consciente de esa realidad, Osorto no deja de lamentar la hora en que permitió que los menores viajaran a Houston.
“ Fue un gran error el mío habérselos enviado a ella. Eso es lo que yo digo, pero como el destino nadie lo sabe. Si yo hubiese sabido que mis niños iban a fracasar así de esa manera, de puro descuido, porque fue un descuido”, sentencia la mujer.
Gratitud en Honduras por la búsqueda de Josué y Jefferson Pérez
Osorto quedó al cuidado de los gemelos desde que tenían 3 años. “ Para mí -confiesa- eran mis hijos, mis segundos hijos, porque toda la vida yo conviví con ellos; dormíamos juntos, comíamos juntos, iban a la escuela porque yo los mandaba. Toda una vida con ellos”.
Insiste en que la familia de Josué y Jefferson Pérez en Honduras agradece a los socorristas y autoridades en Estados Unidos por todo el trabajo y el esfuerzo de rescatar a los gemelos.
"Quiero dar las gracias, de todo corazón, a los rescatistas, a los buzos, a los que andan por vía aérea, a todas las personas que se están movilizando por mis gemelos. Que se haga lo que Dios quiera, que él ya sabe que con vida no están", concluye entre lágrimas.
Gemelos esperaron 10 años por el reecuentro con mamá
En noviembre pasado, Josué y Jefferson Pérez lograron llegar a Houston, Texas, para reunirse con su madre biológica, a quien no habían visto en 10 años.
Los menores, según se informó, estaban felices de haber huido de la violencia y la situación que vivían en su país. Al cruzar la frontera se entregaron a la Patrulla Fronteriza y aseguraron que no querían regresar a Honduras.
El domingo pasado, la familia disfrutaba en Galveston de un día de playa cuando los menores desaparecieron. No sabían nadar y, aunque estaban muy cerca de la orilla, en un momento la madre los perdió de vista.
Comenzó la búsqueda por cielo, mar y tierra, participaron varias agencias de la ley y la organización Texas EquuSearch también estuvo presente.
El martes en la madrugada la Patrulla de Playas confirmó el hallazgo del cuerpo de uno de los menores y este jueves, a la 1:00 de la mañana, fue encontrado el cuerpo del otro.
Salvavidas dice qué hacer si quedas atrapado en una corriente de resaca
Las playas de Galveston se mantienen bajo alerta debido a las fuertes corrientes de resaca que representan un peligro para los bañistas.
Peter Davis, jefe de la Patrulla de Playa de la Isla de Galveston, recomienda no nadar en contra de la corriente sino hacerlo paralelo a la playa.
Si no sabes nadar, pero puedes flotar, déjate llevar y la misma corriente te devolverá a la orilla.














