Henry Hernández, un masajista que sus manos trabaja para sanar las dolencias de sus pacientes
Hernández se certificó como masajista terapeuta hace 40 años, pero ha seguido estudiando diferentes técnicas para procurar ayudar en a sanar a quien lo necesite. Quienes han recibido los masajes dicen que "él tiene un don".
Henry Hernández, un masajista que sus manos trabaja para sanar las dolencias de sus pacientes
Hernández se certificó como masajista terapeuta hace 40 años, pero ha seguido estudiando diferentes técnicas para procurar ayudar en a sanar a quien lo necesite. Quienes han recibido los masajes dicen que "él tiene un don".