A través de un informe de 172 páginas, la policía detalló las estrategias que está desarrollando para cumplir con un decreto de consentimiento que tiene como objetivo hacer a la institución local más profesional y efectiva. El documento resalta un programa para identificar a oficiales que necesitan apoyo psicológico, la contratación de un coordinador de idiomas y la creación de un grupo comunitario para analizar políticas relacionadas con el uso de la fuerza.