"Queremos mostrar que es segura": Gobernador de Texas recibe la vacuna contra el coronavirus

AUSTIN, Texas.- El gobernador de Texas, Greg Abbott, recibió su primera dosis de la vacuna contra el coronavirus este martes con el fin de demostrar que es segura.

“Queremos que los texanos confíen en estas vacunas. Un reporte indicó que más de la mitad de los texanos no estaban seguros de esta vacuna por preocupaciones. Por eso estamos aquí…es importante para los líderes que nos vacunemos para mostrar que es segura y efectiva”, indicó Abbott.

Durante una breve conferencia antes de la vacunación, Abbott indicó que para finales de esta semana ya se habrán distribuido al menos 800,000 dosis.

Asimismo, indicó que esperan aumentar el número de la distribución para enero y febrero. “Habrán vacunas disponibles para todos los que quieran ponerse la vacuna”, indicó.

El mandatario recibió la vacuna Pfizer el Centro Médico Ascension Seton en Austin y tras el proceso aseguró que ‘no dolió’.

Durante la primera semana de distribución de la vacuna, el estado de Texas recibió más de 220,000 dosis de la vacuna Pfizer.

Para la segunda semana de distribución, que comenzó el lunes, los funcionarios de salud de Texas dijeron que esperan recibir más de 620,000 dosis de vacunas.

El estado indicó que los primeros en recibir la vacuna serían los trabajadores de hospitales que tienen contacto directo con pacientes, personal de hogares de ancianos u otras instalaciones de atención a largo plazo que trabajan directamente con los residentes. Los funcionarios de salud estatales anunciaron que las personas de 65 años o más y los mayores de 16 que tienen afecciones médicas crónicas serán los siguientes en la fila para recibir las vacunas contra el coronavirus.

Las vacunas llegan en momentos en que el estado ha registrado un aumento drástico en los casos, incluyendo un hospitalizaciones.

Hasta el 21 de diciembre, el estado ha reportado 1,413,684 casos confirmados desde que inició la pandemia. Al momento, hay al menos 10,009 pacientes hospitalizados en Texas por complicaciones con el virus, estableciendo un récord en comparación con los casos que se registraron en verano.