ATLANTA, Georgia. - Ana Jessica Martínez es una madre de 29 años que ha luchado por años para revertir sus problemas de salud, los cuales se han complicado especialmente en los últimos dos años.
“Mis huesos se están derritiendo”: madre hispana busca una muerte digna tras luchar por años contra rara enfermedad
Ana Jessica Martínez lleva varios años luchando por recuperar su salud. Sin embargo, ahora se encuentra recibiendo cuidados paliativos que la acompañan en sus últimos días. “Luché tanto como pude, ha sido una batalla tras otra”, se lee en el mensaje.

“Mi salud se deterioró drásticamente hasta el punto de que tengo más días malos que días buenos”, escribió Ana en una cuenta de GoFundMe.
“Luché tanto como pude, ha sido una batalla tras otra… ahora estoy en cama mis huesos se están derritiendo literalmente tengo tantas fracturas que ni siquiera sé cómo estoy funcionando con tanto dolor”, se lee en el mensaje.
Ana Jessica nació con espina bífida, un defecto congénito que ocurre cuando la columna vertebral y la médula espinal no se forman adecuadamente. Cada año nacen en Estados Unidos alrededor de 1,600 bebés con esta malformación.
Cuando salió embarazada los médicos le confirmaron lo riesgoso y que ponía en riesgo su vida agravando más su enfermedad. Ella quiso asumir el riesgo porque su sueño era tener un hijo. Hoy es madre de una niña de 9 años, quien ha sido su motor para seguir luchando.
“He tratado de luchar tanto como pude para poder ver a mi hija crecer y mi objetivo en la vida era solo para enorgullecer a Dios, mi hija y mi madre… puedo decir con seguridad que lo logré porque no es fácil estar en mi lugar”, indicó ella en su mensaje.
El dolor de la familia de Ana
“Su cuerpo se está encogiendo, sus pies están deformándose y sobre todo el dolor que ella está pasando”, dijo María Zambrano, madre de Ana, en entrevista con Jensser Morales.
“Ella está en la etapa final de su vida. Ella tomó la decisión de recibir cuidados paliativos, que consisten en que ya deja de recibir su tratamiento médico”, agregó María.
Su familia aceptó su decisión y la acompaña. María indicó que su nieta de 9 años entiende lo que está ocurriendo. “Ella adora a su mamá y le duele, pero está consciente de que ahora es mejor. Su mamá está pasando por mucho dolor y ella entiende que eso ya va a parar”, dijo.
Ana y su familia crearon una cuenta de GoFundMe para costear sus servicios funerarios y el hospicio. “No quiero que mi madre se preocupe por el dinero una vez que no esté aquí”, indicó Ana.
“Yo le quiero decir a mi hija que le agradezco toda la fe que ha puesto en mí. Que ella siempre me ha dicho que yo puedo salir adelante”, dijo María.








