En menos de una semana, agentes de ICE cerraron el paso a dos hispanos que se conducían en una camioneta y que estaban por salir de un complejo de apartamentos del área de Atlanta. En el primer encuentro, uno de los oficiales hizo una señal obscena a Daniel Martínez y su padre, mientras que el joven lo insultó. En el segundo incidente, cuatro días después, los agentes federales se valieron de la complicidad de la policía de Chamblee para detener a los indocumentados. Los episodios, que fueron transmitidos en Facebook Live, dejaron en evidencia la colaboración entre Inmigración y las policías locales, y sembraron una profunda duda sobre lo que en realidad sucede en los operativos de ICE.