TUCSON, Arizona. - La cifra oficial de cuerpos encontrados en el desierto de Arizona suma 131 hasta el momento, menos que el año pasado, cuando hallaron a 214 personas sin vida, según la Oficina del Médico Forense del condado Pima.
La morgue de Tucson tiene 100 cuerpos de migrantes en sus congeladores que no han sido identificados
La Oficina Forense del condado Pima ha recibido los cuerpos de 130 inmigrantes que se presume perdieron la vida en su recorrido por el desierto de Arizona, luego de cruzar la frontera, solo 30 han sido identificados.
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De los 131 cuerpos y restos humanos encontrados recientemente 100 se encuentran sin identificar en la morgue en Tucson.
“Aquí estamos en la hielera donde ponemos los cuerpos y restos de las personas que han fallecido en el desierto”, explicó Gene Hernández, inspector principal en la Oficina del Médico Forense condado Pima. “Vamos a mirar un caso que llegó aquí hace como dos o tres semanas. Esta persona no está identificada ahorita y los doctores están haciendo todo lo que pueden para identificarla”.
Sin embargo, organizaciones humanitarias que trabajan por los inmigrantes no están de acuerdo con la cifra oficial, aseguran que puede ser mayor.
“Es un desierto grande y estoy seguro que cuando encontramos, lo que encontramos es solo un porcentaje del total”, dijo Bob Feinman, vicepresidente de Human Borders.
Feinman junto con los voluntarios de esta organización del sur de Arizona apoyan a los inmigrantes que se arriesgan cruzando el el desierto brindándoles garrafones de agua que distribuyen en las áreas donde han encontrado cuerpos.
Humane Borders se tomó la tarea de crear un mapa virtual llamado Arizona Opengis Initiative for Deceased Migrants, que tambien es utilizado por el médico forense.
“Cada persona que nos encontramos en el desierto, se marcan con el GPS y podemos localizarlos. Si en el futuro hay más huesos o algo así de la misma persona le podemos hablar a la familia”.
La desaparición y muerte de inmigrantes en su intento de cruzar la frontera no va a terminar mientras no haya un cambio en las leyes.
“Las leyes necesitan cambiar en todos los países con los que estamos trabajando tanto en Estados Unidos, como en México, El Salvador y Honduras”, agregó Hernández.
Las personas que tienen familiares desaparecidos en la frontera deben comunicarse con sus consulados para que se inicie un proceso de ADN y compararlo con la información que tiene el forense.
