Hay "halcones" y cámaras: así es como bandas criminales vigilan la frontera entre México y Arizona

HERMOSILLO, Sonora – Campamentos de “halcones”, cámaras de vigilancia y hasta una antena de comunicación han sido parte de los decomisos que han hecho las autoridades de la zona fronteriza entre Sonora y Arizona, y que atribuyen a bandas criminales que se dedican al tráfico de drogas y de personas.

En el más reciente hallazgo, autoridades mexicanas informaron que desmantelaron cinco campamentos utilizados como puntos de observación clandestinos en la zona fronteriza.

La Secretaría de Seguridad Pública de la entidad detalló que los campamentos fueron desmantelados tanto en Nogales, Sonora como en Nogales, Arizona, gracias al trabajo conjunto entre autoridades mexicanas y estadounidenses.

Estos sitios de observación se encontraban en lo alto de los cerros o en sitios despoblados. Una vez que los hallaron, las autoridades destruyeron los campamentos.

Las investigaciones de las autoridades indican que los grupos criminales establecen estos campamentos para realizar labores de vigilancia o “halconeo”. Desde allí observan operativos de las autoridades y se comunican con sus cómplices, para evitar que sean detenidos.

De este modo, los llamados ‘halcones’ vigilan y comparten tanto los movimientos de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos como de la Guardia Nacional mexicana, para facilitar actividades criminales de cruce de migrantes y tráfico de drogas.

No es la primera vez que las autoridades localizan campamentos de este tipo.

Por ejemplo, en enero de 2023, fue desmantelado un campamento en lo alto de una montaña en el Gran Desierto de Altar, tras ser visto por un dron.

En esos sitios es común encontrar armas, pero también algunos otros artículos que permiten ver que quienes laboran en estos campamentos viven en ellos, al menos por un tiempo.

En tanto, a principios de este mes, la Secretaría de Seguridad Pública informó la detección de una antena de radiocomunicación clandestina “utilizada por grupos delictivos que operan en la región”.

Los criminales tienen su sistema de vigilancia

Este hallazgo de campamentos ocurre días después de que las autoridades informaran que desmantelaron una red de cámaras de videovigilancia instaladas en la frontera entre Arizona y Sonora, atribuidas a grupos narcotraficantes.

Se trata de 24 cámaras instaladas en varios puntos cercanos a la frontera, presuntamente utilizadas también para labores de vigilancia por traficantes de drogas y/o personas.

Estos dispositivos electrónicos se encontraban colocados en lo alto de postes de luz y árboles de las zonas, así como cerca de domicilios haciéndose pasar como cámaras de particulares. Una vez desinstaladas, fueron puestas a disposición de autoridades federales.

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