Entretenimiento
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3/11Eso porque de vez en cuando es tanta la necesidad de los medios por una declaración que el pequeño se lleva la peor parte.
María de Jesús Candedo
4/11Matías se ha convertido en experto y ya esquiva muy bien los golpes.
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9/11Otras veces, observa con atención a quienes le hacen preguntas a su mamá.
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Así han sido los días del hijo de Marjorie de Sousa y Julián Gil en los juzgados
El pequeño Matías tiene solo ocho meses pero ya ha tenido que enfrentar algunos golpes de la vida, mientras espera el día en que pueda ver de nuevo a su papá.

En ocasiones las preguntas de la prensa parecen ser algo incómodas hasta para Matías.
María de Jesús Candedo
La práctica enseñó a Marjorie que lo primero que tiene que proteger del pequeño cuando va a la corte mexicana es su cabecita.
María de Jesús Candedo
Eso porque de vez en cuando es tanta la necesidad de los medios por una declaración que el pequeño se lleva la peor parte.
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Matías se ha convertido en experto y ya esquiva muy bien los golpes.
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En ocasiones hasta prefiere detener algunos micrófonos. Más vale prevenir.
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Las luces de las cámaras son bastante molestas y este bebé aún no se acostumbra del todo a los reflectores.
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En ocasiones prefiere llevar sus manitas muy pegaditas al cuerpo.
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Y ante la insistencia de la prensa el pequeño a veces no puede evitar hacerles caras.
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Otras veces, observa con atención a quienes le hacen preguntas a su mamá.
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Marjorie le dice que las esponjas de los micrófonos son narices de payaso y el hijo de Julián Gil ya comienza a jugar con ellos.
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