Los misterios del cañón del Río Lobos

Como en España hay de todo lo que un turista pueda buscar y las construcciones románicas proliferan por doquier, tal vez hablar del Cañón del Río Lobos en la localidad de Castilla y León pueda resultarte algo sin gracia y aburrido que no vale la pena leer.

Pero si a este cañón y a sus cuevas y recovecos le adosamos la dosis de misterio y leyenda que ostenta con tanta oscuridad y signos de interrogación, probablemente este paisaje tal vez común y similar a otros paisajes españoles se vuelva una olla de secretos e ingredientes ocultos que desearás probar alimentado por la curiosidad.

Aquí todo parece natural y silencioso a primera vista. Es un verdadero masaje visual el apreciar este cañón desde un punto alto que permita tener todo al alcance de la visión, pues todo se levanta y cae rodeado de juncos y humedales, sobre cuevas y con tintes verdosos proporcionados por los árboles; una escena que aboca más que nada paz y tranquilidad.

Ermita de San Bartolomé: lugar de misterios y leyendas templarias

Pero al adentrarse en la historia de este lugar uno no puede dejar de sentir curiosidad y necesidad de investigar qué es lo que aquí ocurrió. ¿Qué es esa ermita templaria de San Bartolomé? ¿Qué hay bajo esas cuevas que se esconden entre las rocas?

El cañón sirvió de lugar de hospedaje para antiguos pobladores prehistóricos de la región, pues proporcionaba un lugar seguro y resguardado de eventuales ataques enemigos, además de resultar una locación con fácil acceso al agua por su proximidad con el Río Lobos que lo cruza. Las cuevas son un lugar que obliga a visitarlas, pues es una buena opción para conocer la historia de este bonito y misterioso lugar.

La segunda escala que el turista debe hacer es la ermita románica de San Bartolomé, construida en el siglo XII y que pudo haber sido un convento. Sus constructores probablemente hayan sido caballeros de la Orden del Temple, quienes eligieron este punto geográfico por razones mucho más interesantes que un entorno bello y apacible.

Se cree que aquí los monjes venían a recobrar energías, y que este lugar representa un punto místico dotado de cierta significación, pues está exactamente equidistante al oriente y occidente peninsulares.

Aprovechar un par de días (no te llevará más tiempo) para ahondar en el conocimiento de este interesante lugar es una opción excelente que servirá para alimentar un poco tu curiosidad y espíritu investigativo. El tema de los Templarios es una temática interesantísima, y verla de cerca es algo apasionante. El cañón del Río Lobos te la mostrará al detalle.

Vía | Hola