Granja robótica promete más eficiencia sin dañar el medio ambiente

Una buena alimentación necesita de vegetales, ojalá frescos, pero los precios por obtener verduras de calidad es muy alto, eso sumado a la falta de terrenos para cultivar en varios países.

En Japón tienen la solución: crearon la primera granja 100 % robótica del mundo, que además de producir en mayor cantidad y menor tiempo, promete ser amigable con el medio ambiente.

• Ver también: «Conoce la granja interior de vegetales más grande del planeta»

Granjeros robots y tecnología de punta 

Los vegetales no son económicos, sobre todo en países como Japón, donde la gran mayoría deben ser importados dado el escaso suelo para cultivar. Una empresa Nipona quiere crear una granja ultramoderna donde los humanos sobran.

Se trata de Spread, una empresa dedicada al desarrollo de invernaderos sustentables y que para 2017 promete tener en funcionamiento una granja en donde los trabajadores son robots, siendo capaces de producir 10 millones de lechugas al año.

Esta granja que aún no tiene nombre, está ubicada dentro de una estructura cerrada y, mediante el cultivo hidropónico, uso de luz artificial y manejo de las condiciones climáticas, promete una eficiencia mucho mayor a la de los métodos tradicionales.

Una de las mayores diferencias con respecto a un campo como los que conocemos, es que los encargados de plantar las semillas, ordenar la plantación, cosechar y dejar las lechugas listas para distribuirse son robots y, los humanos solo se quedan detrás de la computadora supervisando.

Cultivos sustentables para mayor producción

Lo primero que nos llama la atención sobre la granja que Spread comenzará a construir el próximo año es que los humanos tienen un rol secundario y quienes realmente hacen el trabajo manual son robots.

Esta «fábrica de vegetales» que en una primera etapa se concentrará en diferentes variedades de lechuga, está completamente automatizada y pensada para producir al máximo sin derrochar recursos.

Un ejemplo importante es el uso del agua: Un 98 % del agua que se utiliza en los cultivos, que cada vez es más escasa, se recicla para volver a usarla, lo que no solo baja los costos sino que también cuida este precioso recurso.

El uso de luces especiales para estimular el crecimiento de los cultivos junto a un control de la humedad hacen que la producción sea más rápida, ya que se pueden simular las diferentes estaciones del año y los factores necesarios para el desarrollo de vegetales.

Un plus de estas lechugas es que podrían ser considerados orgánicas, ya que no se utilizan pesticidas, y los creadores de este interesante sistema aseguran que son más higiénicas y puras que las que se producen con los métodos tradicionales.

Spread espera que su granja ya está produciendo lechugas para el verano de 2017 y aseguran que los sistemas utilizados junto a la mano de obra robot, permitirán precios más económicos que los actuales.