Aunque todavía no hay nada seguro ni confirmado, la extraña señal de radio detectada por el radiotelescopio ruso Ratan-600 ha revolucionado a la comunidad científica y despertado todo tipo de especulaciones, miedos, esperanzas y teorías en torno a un posible contacto con una civilización alienígena avanzada.
Esta potente y extraña señal desde un sol a 95 años luz podría ser nuestro primer contacto con una civilización alienígena
Por:Univision
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No obstante, la mayor parte de científicos que han realizado declaraciones sobre el tema son cautos y no lanzan las campanas al vuelo. Es necesaria una investigación exhaustiva y un seguimiento por parte del SETI, pues lo más probable es que la señal recibida sea un fenómeno natural para el que todavía no se encuentra explicación.
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¿Qué tiene de particular esta extraña señal?
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Sea como fuere, y aunque se trate de un fenómeno natural, lo cierto es que esta señal tiene una serie de particularidades que la hace muy especial. Para empezar, porque proviene de un punto concreto en el espacio.
La señal fue emitida desde una estrella conocida como HD 164595. Dicha estrella tiene 0,99 veces la masa del Sol, una edad estimada de unos 6000 millones de años y ubicada a poco menos de 95 años luz de nosotros. Es decir, que podría considerarse como un hermano gemelo de nuestro astro rey.
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Sin embargo, alrededor de la estrella en cuestión solo se ha descubierto a día de hoy un planeta orbitando, y este sería un gigante gaseoso con unas 16 veces la masa de la Tierra, que gira sobre su sol completando una vuelta en unos 40 días. Se le considera como un Neptuno caliente.
¿Pero es posible que haya más planetas alrededor de HD 164595? ¿Será HD 164595 b el origen de esta señal y hemos encontrado nuevas formas de vida que no se basan en el carbono? ¿O realmente es un extraño fenómeno natural para el que no tenemos aún respuesta?
Más datos de interés sobre la señal recibida
La señal que detectó el radiotelescopio Ratan-600 fue recibida el 15 de mayo de 2015, aunque esta información sale ahora a la luz. En ella se encuentra una longitud de onda anormalmente alta, llegando hasta unos 2,7 centímetros. Según sus descubridores, es demasiado alta para ser algo natural.
El hecho de que sea de gran potencia y provenga de un punto concreto es lo que alarma a la comunidad científica. Se sabe que no es una supernova o fenómeno similar, pero no se puede afirmar con rotundidad que su origen sea intencionado.
Sin embargo, sí se ha especulado que pudiese ser originada por una baliza alienígena, lo que nos enfrentaría ante una civilización del Tipo II en la Escala de Kardashov, es decir, una sociedad que ha aprendido a explotar todos los recursos de su estrella anfitriona, por lo que tendría energía casi ilimitada.
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También los científicos estipulan que podría ser una civilización de Tipo I en la Escala de Kardashov, en un estadio de desarrollo similar al de la Tierra, que comienza a aprovechar todos los recursos del planeta, tanto fósiles como solares, del agua, viento, etc. Este sería el caso de que la señal se hubiese centrado en nuestro Sistema Solar, y fuese origen de una sociedad que busca saber si está sola en el universo, como nos sucede a nosotros.
Esta nueva señal que será seguida con especial atención por el SETI se une al célebre «WOW!» recibido el 15 de agosto de 1977 o a la posible extraña estructura extraterrestre localizada en la estrella KIC 8462852, a 1500 años luz de la Tierra y de la que poco se sabe todavía. Sea como fuere, parece que cada día estamos más cerca de responder a la eterna cuestión, ¿estamos solos en el universo, o acompañados?
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