Hoy vamos a hablar de una de las especies más singulares de la isla de Madagascar, el mamífero que está considerado el mayor depredador endémico de la misma y cuya apariencia tiende a confundir a muchas personas la primera vez que lo ven: el fosa de Madagascar.
El fosa, el mayor depredador de Madagascar

El curioso físico de la fosa de Madagascar
El fosa de la Isla de Madagascar ( Cryptoprocta ferox) es un habitante regular de las zonas boscosas de esta isla africana del océano Índico, aunque puede encontrarse a veces en las sabanas, las praderas y las zonas de matorrales.
Aunque frecuentemente suele confundirse a la fosa con un felino, esto es solo en apariencia, pues pertenece a un grupo de animales que están alejados de estos últimos, la familia Eupleridae, aunque ambos pertenecen al orden de los canívoros.
El fosa presenta un cuerpo muy estilizado y grandes ojos que les permiten ver mejor en la noche, cuando son más activas, y presentan también una larga cola. Su tamaño también es muy similar al de un gato grande, llegando a medir unos 80 cm aproximadamente.
Los superdepredadores de Madagascar
El fosa es considerado uno de los depredadores más importantes y más grandes entre los mamíferos de Madagascar, y su dieta es muy variada, pudiéndose alimentar de aves, pequeños mamíferos, anfibios, insectos y reptiles, pero también de los conocidos lémures, siendo la principal amenaza natural para estos primates.

Para capturar a los lémures, utilizan su impresionante habilidad para trepar a los árboles y saltar entre sus ramas con mucha precisión, por lo que los lémures siempre están muy atentos ante la llegada de una fosa, sin dudas su peor pesadilla. No obstante, esto no puede verse de ningún modo como algo negativo, ya que al contrario, son excelentes y muy necesarios controladores biológicos en los ecosistemas.
Estado de conservación de la fosa
Los fosas son animales cuyas poblaciones están en franca decadencia debido principalmente a la fragmentación del hábitat que causa la tala de los bosques y los incendios forestales provocados por el hombre. Por otro lado, son muy perseguidos por los campesinos ya que se consideran animales feroces que pueden alimentarse de las aves de corral y otros animales domésticos, aunque en realidad los reportes de este tipo de situaciones son bastante escasos y se consideran más bien infundados y, si ocurren, es consecuencia de la propia acción humana al invadir cada vez más las áreas que le corresponden a la fauna salvaje.

Hoy, se estima que quedan menos de 2500 fosas en todo el territorio de Madagascar, por lo que se está intentando concientizar a la población de la importancia de este depredador para el equilibrio del ecosistema.
Madagascar es sin lugar a dudas uno de los paraísos de los biólogos a nivel mundial. Una de las razones principales para tal aseveración la constituye el hecho de que es uno de los lugares con mayor y más singular biodiversidad de la Tierra, donde los procesos evolutivos han tomado un rumbo sumamente interesante, siendo probablemente su fauna el mejor ejemplo de ello. ¿Sabías que en Madagascar vive también el camaleón más pequeño del mundo?







