Del tango a la Ópera de Pekín: 7 tradiciones del mundo que fueron reconocidas por la Unesco

En lo que respecta a la política de la Unesco a la hora de designar nuevos patrimonios, los templos y bosques no son los únicos representantes de esas culturas o lugares que entran a formar parte de la selecta lista de la ONU. No, hay mucho más. Proteger la historia conlleva no sólo seleccionar los mejores lugares físicos, sino también esas costumbres ligadas a la tradición de un determinado enclave, dando como resultado la lista de patrimonios inmateriales en 2008 o, en este caso, esas 7 tradiciones curiosas que fueron reconocidas por la Unesco durante los últimos años. 

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Ópera de Pekín 

Surgida a finales del siglo XIX tras una representación para la dinastía Qing, la Ópera de Pekín es una de las máximas representaciones artísticas de la cultura china. Las obras, protagonizadas por tres hombres y una mujer, utilizan los colores del vestuario para representar diversos estados morales, virtudes y defectos, de ahí que el blanco represente la mentira, el rojo la valentía o el dorado a las deidades orientales. Los bailes chinos, las canciones en antiguos dialectos, las intrigas palacielas que maceran sus historias, la música típica y, ante todo, el colorido de sus bandas, dragones y joyas convierten esta tradición china es uno de los patrimonios inmateriales más vistosos del mundo

Kutiyattam

De naturaleza similar al de la Ópera de Pekín, el kutiyattam es un teatro sánscrito original del estado sur de Kerala, el más tropical de la India. Celebrados en los llamados  kuttampalams, o teatros acondicionados en templos hindús, el kutiyattam suele ser evocado mediante danzas y dialectos tamiles, al mismo tiempo que los colores, ungüentos a base de coco y máscaras imposibles son lucida por sus actores, capaces de expresar cualquier sentimiento mediante el más mínimo de sus movimientos, como los famosos mudras (o giramientos de manos). A diferencia del similar kathakali, el kutiyattam sí permite una mayor participación de las mujeres. 

Día de los Muertos

Cada 1 y 2 de noviembre, los mexicanos celebran su particular versión del Día de los Muertos, la representante más colorida, folclórica y peculiar de todas las celebraciones que tienen lugar alrededor del mundo durante la semana más naranja del otoño. Concebida como una reinvención menos lúgubre y hasta cómica de la muerte, durante esos días los familiares elevan los famosos altares en honor a sus difuntos, beben tequila entre fantasmas y convierte a los esqueletos de colores en el principal icono de esta fiesta de carácter indígena convertida hoy en el corazón de la tradición mexicana. 

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Música marimba

La música forma parte intrínseca de cualquier cultura y en el caso de los países centroamericanos y caribeños, la marimba, una especie de xilófono, surgió en la mexicana Chiapas hasta desplegar su encanto tropical por Guatemala, Costa Rica (país del que es instrumento nacional), Colombia o Ecuador.

Este es un ritmo exótico que bien mereció el designio de la Unesco en 2015 junto con los bailes a los que acompañan en lugares como la ecuatoriana provincia Esmeraldas o los estados pacíficos de Colombia. A su vez, el conocido género vallenato colombiano fue inscrito en la lista como patrimonio de urgente protección.

El silbo gomero

En la isla canaria de La Gomera, los antiguos pastores descendientes de los guanches comenzaron a fomentar los silbidos para comunicarse entre ellos de un barranco a otro. Debido a la creciente desaparición del pastoreo y la llegada de la modernidad a la isla, la Unesco decidió designar esta  tradición en su lista de patrimonios inmateriales a fin de conservar tan secreto lenguaje. 

Al-Taghrooda

En mitad del desierto de Emiratos Árabes o el Sultanato de Omán, los jinetes se apean de los camellos durante un largo rato y se dividen en dos grupos. Un primero entona el verso de introducción y el segundo responde, dando cuerpo a unos poemas de siete líneas cantados por los nómadas beduínos de Oriente Medio.

Arraigados íntimamente a esta cultura, el Al-Taghrooda (o canto beduino) abarca temas que van desde el amor o el desamor hasta las victorias guerreras, pasando por mensajes regalados al viento a fin de que lleguen a las lejanas familias que aguardan la llegada de estos hombres errantes. 

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Tango

El género musical que mejor define la cultura de Argentina y Uruguay pasó a ser patrimonio inmaterial en 2015 como empeño de la Unesco por preservar el que es uno de los bailes más sensuales, exuberantes y, también, ciertamente melancólicos del mundo.

Los colores negros y rojos (incluida esa mítica rosa) o el poético movimiento de dos amantes que ejecutan tan íntimo baile se dejan acompañar por letras de desamor e incluso dialectos rioplatenses, en referencia al lugar en que este género nació como resultado de la fusión multiétnica de los guanches, los europeoos y hasta los africanos. 

Estas 7 tradiciones del mundo que fueron reconocidas por la Unesco forman parte de la lista de patrimonios intangibles designada por el comité de la ONU desde hace casi diez años. Una genial oportunidad para adentrarse en los aspectos más íntimos de esas diferentes culturas a la vez que las costumbres más ancestrales del mundo son convervadas de la modernidad, del arte del hombre para erradicar sus raíces en ciertos momentos.

¿Cuál de estas tradiciones te gustaría conocer?

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