Celeste tiene 3 años y ama la pintura. Puede pasar horas y horas pintando. El pasado 6 de octubre su madre, Andrea Sambuccetti, le dio un lápiz y un cuaderno y la sentó en el sofá mientras cocinaba. Cuando volvió, Celeste había cambiado el lápiz por un rotulador indeleble y había pintado el sofá de cuero blanco de su casa. La niña argumentó muy bien su obra: estaba dibujando el sistema solar y no cabía en el cuaderno, así que tuvo que seguir por el sofá. Obvio.
Si tu hija se hace famosa por pintar en el sofá, ayúdale a terminarlo
Celeste pintó un sistema solar en el sofá, y su madre, la corresponsal de 'Aquí y Ahora', en una decisión polémica en las redes, colabora en su obra

La foto fue enviada al programa de Ellen De Generes por Silvia Salgado, directora de integración digital de Univision Noticias. Ellen la colgó en su twitter, donde tiene 5,500 me gusta, y en su Instagram, donde supera los 400,000 likes y tiene más de 6,300 comentarios. Muchos de ellos se plantean qué pasó a continuación: ¿la niña fue reprendida, limpiaron el sofá, se echó a perder definitivamente? Pues bien, tal y como nos cuenta su madre, corresponsal del programa 'Aquí y Ahora' de Univision, decidió comprender a su hija: un cuaderno no es suficiente para pintar un sistema solar. "Para mí hay que poner límites cuando algo es vandalismo, o cuando tu hijo es un maleducado, pero en este caso era poner límites al arte y el arte no debe tenerlos", explica.

Andrea trató de limpiar el sofá, pero fue imposible. Antes había dicho a Celeste que no pasaba nada por pintar en el sofá si sentía que debía terminar su cuadro, que era inmenso y bonito. Además, cuando Andrea contó a su hija el éxito de su obra la niña se puso como loca, como se puede ver en los videos que colgó en Facebook.
A continuación Andrea llamó a unos amigos, Armando Tejuca, que es artista, y Naday Balbuena, que es productora televisiva, y entre todos ayudaron a Celeste a terminar su obra coloreando el sistema solar que la niña había esbozado. Ella, claro, no pudo ser más feliz.

Andrea reconoce que su solución es polémica. "Cuando comenté que no le había regañado hubo mucha gente que reaccionó mal diciendo que no sé dónde están los límites y que no le estoy enseñando a comportarse. Soy psicóloga y toco el piano, sé que luego andamos todos en terapia porque ya no sabemos cómo romper los límites que nos imponen. Ella sintió que debía continuar su cuadro pero no era una provocación. Si me tira la comida o se porta mal le pongo límites, pero al arte no se los pongo porque no los tiene".
De hecho Andrea fomenta en Celeste su vocación artística. La niña pinta, canta al piano con su madre y bailan juntas también. Hacen esto cada día, aunque Celeste prefiere muchas veces quedarse pintando que cantar. "A mí me habría encantado dedicarme a la música y por eso le hago cantar, pero a veces veo que no le gusta tanto como la pintura y que quizás es una frustración mía. Los padres deberíamos ser muy cuidadosos con proyectar en nuestros hijos".








