Adiós a la colita de caballo, Lin-Manuel Miranda estrena estilo

“Ellos por fin me hicieron quitar mi suéter gris”, con esta jocosa frase Lin-Manuel Miranda, el emblemático creador de Hamilton, presentó en redes la nueva portada de la revista GQ que protagonizó con un look que lo hace casi irreconocible.

Con un estilo muy preppy, de chamarra tipo bomber, camisa de botón desapuntado, poderoso reloj dorado y sin asomo de barba el actor lució muy diferente a como lo hizo durante todo el invierno en el que, hasta sus amigos, lo molestaron por no quitarse un cómodo pero más bien anodino saco.

La revista, que le rinde un homenaje no solo por "hacer el musical más influeyente de Broadway sino por su visión optimista, rica y diversa de América", realmente tuvo otro triunfo: logró además desligarlo de esa colita de caballo que tanto marcó su estilo personal.

La extrañaremos claro, porque con ella se inmortalizó en Hamilton, con ella lo recordamos cantando ‘love is love is love’ en la Casa Blanca y con ella se clavó en nuestra memoria rapeando a favor de las víctimas del tiroteo de Orlando. Pero celebramos que nuevos aires de estilo, unso más frescos y sí que lo hacen más guapo le abran las puertas a su nuevo papel en la película Mary Poppins y al mixtape en el que compilarán toda la música de su pieza de Brodaway.

A Lin-Manuel Miranda parece no haberle molestado del todo el riesgo estilístico que le propuso GQ una vez que lo hemos visto protagonizar otras sesiones fotográficas como la que hizo con Time Out Chicago en las que enfundado en un bien cortado y ceñido traje azul le saca partido a su cara más perfilada por el corte y a su esitlo, digamos, un poco más elegante.

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