Los duques de Cambridge tuvieron a su tercer hijo y el instante más esperado de todos aconteció cuando ambos salieron del hospital St. Mary con su bebé. Kate y Guillermo se veían espléndidos y radiantes, estaban alegres y no necesitaron expresar ninguna palabra para demostrar lo que sentían.
El lenguaje corporal de Guillermo y Kate reveló mucho de su tierna relación

El mensaje corporal de los duques
«Si tuvieras que mirar rápidamente las fotos de ellos mostrando a su tercer bebé, no sabrías que son de la realeza», dijo Patti Wood, experta en lenguaje corporal y autora de SNAP: Making the Most of First Impressions, Body Language, and Charisma. La pareja actuó como lo haría cualquier padre que acaba de recibir a su bebé: sonrientes y totalmente enamorados el uno del otro.

Pero hace casi cinco años, los duques no se presentaron de la misma manera. Cuando salieron del hospital con su primer hijo en brazos, fuimos testigos de una pareja tímida que manifestaba pocas expresiones.
«Los pies de Kate casi se superponían cuando estaba de pie en las escaleras», contó Patti Wood a GoodHousekeeping. «Esto indica que ella siente la necesidad de mantener todo junto. Ambos tienen las manos relajadas, pero hay gestos leves en los pies y sonrisas forzadas que indican que están un poco tensos en ese momento».

Con el tiempo, luego de dos años, la pareja se sintió más cómoda como padres y, evidentemente, con los medios. «Ese momento tierno entre Will y Kate es algo sacado de una película», dice Wood. «Sus dedos están encerrados dentro de él, que es una forma sutil de decir "este momento se trata de nosotros"».

Cuando llegó el momento de su tercer bebé, los duques estaban listos para lo que se les presentara. «En cada foto de la pareja, están completamente presentes el uno con el otro», dice Wood. «Este momento es 100 % sobre la nueva incorporación a su familia, y no para los fotógrafos, un patrón que vemos una y otra vez».
Después de unas cuantas horas de nerviosismo y agitación, la pareja se ve relajada, tranquila y hasta un poco cansada. «Incluso en un momento que es incómodo, la pareja se relaja instantáneamente cuando cierran los ojos», dijo a GoodHousekeeping Susan Constantine, experta en comportamiento humano y autora de The Complete Idiot's Guide to Reading Body Language.
Este momento es similar a lo que hemos visto luego del nacimiento de sus hijos anteriores. «Cada uno se inclina el uno hacia el otro», dice Constantine. «Su forma de agarrarlo con los brazos, es casi como si Kate le estuviera presentando al bebé, y Will lo agarra mientras gira los dedos de sus pies y el torso hacia su esposa».


Con su tercer bebé, los duques se ven mucho más relajados y cómodos, algo que demuestran con sus gestos y expresiones.





