¡Necesitas un nuevo sujetador ahora mismo! Estas señales lo demuestran

Llegó la hora de deshacerte de ese sujetador e ir de compras por uno nuevo.

Encontrar el sostén perfecto para cada una es muy importante no solo para la estética y por cómo nos quedarán las prendas con el sujetador indicado, sino y, sobre todo lo más importante, es fundamental para nuestra salud.

¿Sientes que tu sujetador ya no da para más? ¿No quieres deshacerte de él? Presta atención a estas 9 señales, ¡ te están indicando que ya es hora de deshacerte de tu sujetador y comprar uno nuevo!

#1 Ops, el aro ya no se apoya sobre tu piel

Te lo pones, lo sujetas, queda perfecto de espalda, pero… ¿delante? Si el aro ya no se apoya en tu piel es porque necesitas dejar de usarlo. Quizá sea porque te quede chico o porque se haya deformado, pero sin duda tienes que cambiarlo por el bien de tu salud.

#2 Te queda grande incluso cuando lo sujetas en el gancho más pequeño

Ni en el grande, ni en el del medio y tampoco en el más pequeño. No importa en cuál lo pongas, el sostén te queda FLOJO. ¿Sabes por qué es? Luego de tanto usarlo y lavarlo el sujetador pierde la elasticidad que lo caracteriza y eso hace que se estire.

Quizá también hayas adelgazado y ese sujetador ya no sea el adecuado para ti. Cualesquiera que sea la cuestión, ¡es hora de deshacerte de él!

#3 Las copas ya no tienen forma

¿Qué forma tiene? Si la copa tiene forma de zig zag o ha perdido toda forma es porque ya no puede ser usado. Para mantener todavía más la vida útil del sostén no lo laves en la lavarropas ya que eso puede deformarlo.

#4 Pierde la elasticidad

La banda, los breteles, ¿dónde ha quedado la elasticidad? Lo cierto es que con el tiempo los sujetadores pierden su elasticidad, eso hace que no te sientas cómoda ni sea seguro para ti este sostén.

#5 Los breteles se caen sobre tus hombros

Lo tensionas un poco más, lo aflojas, lo vuelves a tensionar, pero incluso así los breteles se caen sobre tus hombros. ¿Te ha pasado? ¡Cambia tu sujetador!

#6 Los breteles se clavan en tus hombros

Bueno, puede ser totalmente lo contrario. Los breteles no se te caen, al contrario se clavan en tus hombros. Y en esta ocasión, será mejor que cambies rápidamente tu sujetador.

Ese sostén te queda chico y te está lastimando la piel, ¡ve por uno más grande con el que te sientas 100% cómoda!

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#7 Los ganchos están rotos

Ops, ¿no hay formo de sujetarlo? ¿Lo enganchas, pero al rato, mientras caminas, se te afloja? Tu sujetador ya tiene demasiados usos, ¡es momento de tener uno nuevo!

#8 Te queda tan ajustado que no hay espacio entre tus pechos

¿Qué ha pasado aquí? ¿Por qué están tan juntos? Tus pechos tienen que tener su espacio, si no es así… ya sabes lo que tienes que hacer.

#9 El aro te lastima

¿Qué es ese dolor insoportable? ¿ El aro se salió de su lugar y te está pinchando sin piedad? Tu sujetador ya no da para más, ¡es hora de comprar uno nuevo!

¿Te han pasado alguna de estas cosas? Es hora de deshacerte de tu sujetador. Es muy importante que estés atenta, ya que el sostén adecuado es fundamental para tu salud.  

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