La candidiasis es una infección muy común producida por un hongo llamado Candida Albicans que a veces puede afectar a los bebés en la boca.
Síntomas y tratamiento de candidiasis en bebés

Los síntomas son muy evidentes y fáciles de notar, ya que la infección luce como manchas de leche cuajada en la boca: en el interior de las mejillas, paladar, encías y a veces en la lengua del bebé. Suele afectar más a recién nacidos que a bebés mayores, y la mayoría de los bebés no tienen otros síntomas ni la candidiasis les genera incomodidad.
Sin embargo, algunos pequeñitos pueden estar incómodos sobre todo en el momento de ser alimentados, y retorcerse en el momento de tomar el pecho o biberón. Otros síntomas posibles son un ruido como clics con la boca al tomar el pecho, y pueden suceder cambios en el color de la saliva y exceso de salivación.
La candidiasis sucede como casi cualquier infección por hongos en el cuerpo, debido a un desequilibrio de la flora natural en el cuerpo, lo cual a veces sucede por los cambios hormonales que el bebé experimenta tras el nacimiento; también puede suceder si la mamá o el bebé ha tomado antibióticos después del nacimiento, ya que este tipo de medicación también generan a veces esos desequilibrios. En ocasiones las mamás pueden tener una infección de cándida en los pechos y se produce el contagio con el amamantamiento. A veces la infección de cándida en el bebé se traspasa a la colita.
¿Cuál es el tratamiento para la candidiasis en bebés?
En la mayoría de los casos no es necesario ningún tratamiento, ya que el cuadro desaparecerá por sí solo al cabo de un par de semanas. Sin embargo, si notas que tu bebé está realmente incómodo (muchos bebes no notan la infección), un pediatra indicará una medicación oral para los hongos. Si la infección le ha tomado la colita al bebé, existen cremas tópicas también para tratarla.
Por otro lado, si estás amamantando a tu bebé y este tiene candidiasis, es recomendable aplicar una medicación tópica anti hongos que te indicará tu pediatra en los pezones para evitar que el contagio vaya y venga entre la mamá y el bebé.









