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Rebekah Vardy: “Hay una presión surrealista sobre bajar de peso luego de dar a luz”

Ser madre es grandioso, la sensación de poder dar vida es inexplicable y el hecho de saber que llevas en el vientre al amor de tu vida es verdaderamente emocionante.

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Pero nadie habla de lo que vivimos para dar a luz.  Nuestro cuerpo cambia, algunos de nuestros órganos deben acomodarse para dar lugar a un ser humano creciendo dentro de nosotras, y nada vuelve a ser como antes.

Rebekah Vardy es la esposa del inglés Jamie Vardy, una de las figuras del Leicester City, por lo que no conoce el significado de vida privada. Todas las decisiones que toma la pareja respecto a su familia son cuestionadas y los miles de seguidores de Rebekah se encargan de hacerla sentir miserable cuando algo no les gusta.

Falta de comprensión

Rebekah es madre de 3 hijos y recientemente dio a luz al cuarto integrante de la familia. Evidentemente su cuerpo lleva las marcas de todos sus embarazos, que ella sabe llevar con mucho orgullo. Sin embargo, los internautas (que pueden ser muy crueles) la insultaron y la juzgaron por el tamaño de su cuerpo.

“Era ridículo, en Twitter me decían que mis muslos eran enormes, que no entendían como Jamie estaba conmigo. La realidad es que acababa de dar a luz, me veía normal. Las mujeres que acaban de dar a luz no deben sentirse feas, ese tipo de abuso no debiera existir. Yo me volví inmune a esos comentarios con el paso de los años, sin embargo una mujer que acaba de parir tiene las hormonas furiosas, no deberían hacerla sentir trastornada o deprimida”, dijo Rebekah a The Sun.

El lugar de las celebridades

El caso de Rebekah es un caso anecdótico ya que ella es una persona pública. Pero este tipo de hechos deberían ser una alarma para la sociedad, para entender qué es lo que estamos haciendo mal y hacia dónde deberíamos ir.

En este punto, las celebridades son quienes deben ayudarnos a construir un mundo con cuerpos reales, para que las personas no se sientan con el derecho de agredir a otro por el tamaño de su cuerpo.

“Hay una presión poco realista sobre las mujeres para que vuelvan al peso que tenían antes del embarazo de la noche a la mañana. Y eso se debe a que muchas celebridades parecen ser capaces de hacer eso. Me molesta cuando oigo a las celebridades decir que volvieron a su peso ideal a menos de 1 mes de dar a luz. Quizás para ellas es normal hacerlo, pero para las demás no lo es. Se ven estrellas con estómagos de lavabos apenas unas semanas después de parir. Se oyen historias de mujeres que tienen una cesárea y una abdominoplastia al mismo tiempo. Nada de eso es normal para la mayoría de nosotros”, dijo Rebekah.

La realidad del cuerpo después de ser mamá

Todas sabemos las presiones que existen sobre el cuerpo femenino, incluso cuando no estamos embarazadas, y es verdaderamente agotador. Sin embargo, todo se potencia luego de dar a luz. 

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El cansancio del parto, la nueva vida como mamá y las responsabilidades que ya teníamos, no nos permiten pensar en cómo tener un abdomen plano en menos de un mes. Solo queremos que nuestro hijo se duerma para tomar una siesta, y déjenme decirles algo: ¡no está mal que así sea!

La forma de nuestro cuerpo no nos define, debemos cuidarlo por salud pero no para competir por quién está más delgada en menos tiempo.

Ser madre es hermoso, vemos como todo confluye perfectamente y nos genera paz, eso es lo que nos tiene que hacer sentir felices. No podemos permitir que algunos kilos demás nos hagan daño, es parte del proceso, poco a poco volveremos a nuestro peso habitual pero mientras tanto no debemos obsesionarnos.

Deberíamos seguir la línea de pensamiento de Rebekah:

“Estoy orgullosa de mi cuerpo, llevé a todos mis hijos durante 9 meses en el vientre y mi cuerpo ha cambiado constantemente para proveerlos. Tengo un vientre tembloroso, piernas más grandes, la piel arrugada y estrías. Como cualquier mujer cuando es madre. Lo importante es estar sana y sobre todo feliz.”

¿Estás de acuerdo con ella?