Dar a luz bajo el agua es una técnica natural cada vez más utilizada entre las mujeres. Si bien a muchas causa impresión, el parto natural en el agua puede ser muy beneficioso tanto para la criatura recién nacida como para su mamá. La explicación está en que el bebé nace en un ambiente similar al saco amniótico, donde estuvo viviendo durante 9 meses, y eso le brinda más tranquilidad y seguridad en el momento de nacer.
Parto natural en el agua

En el caso de la madre, se reduce notoriamente el estrés, pues el agua brinda mayor energía para que el parto se produzca con más facilidad, comodidad y por sobre todo, menos dolor. Además, el hecho de estar sumergidas en el agua incrementa su relajación corporal y mental, y ayuda a bajar la presión arterial alta que causa la ansiedad.
Para dar a luz bajo el agua es fundamental la aprobación de un médico, pues no en todos los casos es aconsejable hacerlo. Por ejemplo, no es conveniente hacerlo con bebés prematuros, con embarazos múltiples o si la madre sufre de enfermedades como herpes, hipertensión, toxemia opreeclampsia. Por ello, debes consultar sí o sí a tu obstetra.
Ya durante el momento del parto, es sumamente necesaria la presencia de un médico u obstetra por para que controle que todo salga bien. Este puede llevarse a cabo en un hospital que se encuentre especialmente equipado para este tipo de partos, o si no puedes hacerlo en tu propia casa con una tina de parto.
Dar a luz bajo el agua puede ser una muy linda experiencia. Las mamás que se han animado a hacerlo lo recomiendan.








