Entre más doloroso sea tu parto eres más propensa a sufrir esta condición

Durante el embarazo, es usual que el dolor que más les preocupa a las futuras madres es el del labor de parto. Las molestias que se presentan después de dar a luz podrían parecer menores, incluso más insignificantes en comparación.

Los expertos acaban de descubrir que ese sufrimiento posterior tiene grandes repercusiones en el bienestar femenino, sobre todo en el psicológico.

Molestias físicas y emocionales

Un estudio científico presentado en la reunión anual de la Sociedad Americana de Anestesiólogos se convirtió en el primero de su especie. Los investigadores se propusieron encontrar la relación entre la depresión posparto y los dolores físicos que se presentan durante esa misma etapa.

Se sabe que el dolor durante el nacimiento del bebé es uno de los desencadenantes de la depresión posparto. Con este trabajo, se llegó a la conclusión de que las aflicciones que vienen después también son responsables de este trastorno. Es decir: entre más dolencias se perciben después de dar a luz, mayor es la probabilidad de deprimirse.

Aunque suena obvio, la realidad es que este fenómeno no ha sido estudiado lo suficiente. Como señaló el médico Jie Zhou (autor líder de la investigación), los expertos se han concentrado en eliminar o controlar el dolor al dar a luz. En cambio, después sólo se receta ibuprofeno o medicamentos similares, sin atender a las particularidades de cada madre.

¿Quiénes son más propensas a la depresión posparto?

Para el estudio, se compararon los niveles de dolor de 4,327 mamás primerizas con las tasas de depresión posparto una semana después de tener a sus bebés. Las mujeres con depresión reportaban más dolencias, necesitaban medicamentos adicionales para tolerarlas y, en su mayoría, no se les recetaban los más adecuados.

Otros factores que también se presentaron con frecuencia en las féminas con depresión posparto fueron: haberse sometido a una cesárea, presentar obesidad o sobrepeso, que su perineo se haya desgarrado y tener un historial de depresión o ansiedad.

Jie Zhou recalcó que los especialistas deberán esforzarse más en el diagnóstico y tratamiento de las dolencias posparto para asegurar que las madres reciban un mejor cuidado.

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