¿Cómo hacer que los niños coman verduras y frutas?

Que nuestros hijos consuman grandes cantidades de verduras y frutas es esencial en su educación alimenticia. Sin embargo, lo que se dice fácil se consigue a duras penas. Muchas veces los menores no se sienten motivados por dichos alimentos a pesar de que insistimos.

¿Existe algún modo de convencerlos sin tener que apelar a los engaños? Por supuesto que sí, sólo hay que tener un poco de paciencia y seguir las siguientes recomendaciones.

• Un gran avance supondrá si tratas de implicar a tus hijos en la confección de los menús del día, la compra de alimentos y luego su confección. Es en ese momento que puedes comenzar a enseñarles las propiedades de cada una de las frutas y vegetales que se ofrecen en el mercado y traemos a nuestras cocinas.

• Procura comprar libros para niños con recetas interesantes, la mayoría orientado a este tipo de comidas sanas. Haz de estas tareas un juego ameno e instructivo y verás cómo se motivan con el resultado a la hora de la cena.

• Los niños son básicamente hacendosos y aman la naturaleza. Aprovecha este espíritu y desarróllalo construyendo un pequeño huerto en el patio de casa. Será muy entretenido para ellos aprender a sembrar y cuidar de una serie de plantas que luego se emplearán en la cocina. Muéstrale sus nombres y sus características. La mayoría de los vegetales tienen colores hermosos y eso agradará sus vistas y alegrará sus corazones.

• Los receptores gustativos infantiles son más sensibles que los de los adultos. Por esta razón, los sabores amargos y fuertes les son difíciles de aceptar. Aun así, es importante acostumbrarlos a comer verduras frescas tales como espinacas y acelgas, entre otras. No es conveniente que las disfraces tras otros sabores, sino que enseñes a tus hijos desde muy temprano a asimilar sabores nuevos. Ello no sólo le abrirá el espectro alimenticio, también le creará una flexibilidad mental y física ante los cambios.

• Un consejo efectivo es ser creativo con los colores, las texturas y las formas de los alimentos. Les motiva mucho cuando sus platos tienen formas graciosas de muñecos y figuras. Ya que el sabor dulce les atrae, prepara recetas con variedad de frutas. También se pueden preparar distintos postres nutritivos.

• Una cosa muy interesante es que los niños tienen que ver un alimento nuevo 4 o 5 veces antes de que empiecen a probarlo. Así que mantente introduciéndoles verduras y frutas que no hayan probado nunca.

No te desanimes: si tienes paciencia, gradualmente tu hijo irá alimentándose cada día mejor y te agradecerá el esfuerzo durante toda la vida.