Entender cómo y dejar de ser una madre sobreprotectora no es fácil. Volvernos desconfiadas y llevar nuestros recaudos al máximo cuando se trata de nuestros hijos, no es bueno para ellos ni tampoco para nosotras. Sin embargo, hay algunas actitudes y cambios que podemos realizar para dejarlos crecer sin sobreprotección.
Cómo dejar de ser una madre sobreprotectora

¿Se puede dejar de sobreproteger a los hijos?
Sí, se puede. Pero si ya te has dado cuenta de que perteneces al grupo de los sobreprotectores, tengo que decirte que cambiar de actitud no es fácil, tampoco imposible. El hecho de proteger a nuestros hijos en exceso puede venir de que hayan hecho lo mismo contigo o todo lo contrario, que a nadie le importara qué es lo que hacías ni con quién estabas. También puede ser porque hayas vivido experiencias traumáticas o tengas un miedo extremo. De una u otra forma, y por el motivo que sea, le transmitirás lo mismo a tu hijo.
Los niños sobreprotegidos se sienten agobiados, controlados y manipulados, y aunque las mamás lo hagamos de forma inconsciente o como se suele decir “por su bien”, lo cierto es que es muy perjudicial para ellos.

Reflexiona acerca de lo siguiente
Si siempre estamos para evitarles una caída, una posible frustración, un desengaño, o cualquier otra cosa que pudiéramos creer que es negativa, ¿cómo crees que aprenderán a desenvolverse por sí mismos cuando sean adultos? Les resultará imposible porque no sabrán cómo hacerlo, ya que en el pasado siempre te han tenido al lado para resolver o impedir un mal trago.
Es necesario permitir que los niños adquieran independencia de acuerdo a la edad que tienen, lo cual no significa que debemos dejarlos solos, sino hacerles saber que estamos cerca para lo que sea que necesiten.
Si quieres saber si eres una madre sobreprotectora, échale un vistazo a nuestro artículo ¿Eres sobreprotector con tu hijo?
Las madres sobreprotectoras sufren más
Esto es cierto, porque siempre estamos pensando qué podría sucederle a nuestro pequeño cuando no está con nosotros, lo que nos hace incapaces de disfrutar de nuestro tiempo libre, nos llenamos de miedos y hasta puede que muchas veces no permitamos a los niños desarrollar ciertas actividades, con lo cual estamos coartando sus deseos, necesidades y la expansión que requieren para experimentar por ellos mismos la vida.

Consejos para dejar de ser una mamá sobreprotectora
- Confía en tus hijos, déjalos que prueben y puedan decidir por sí mismos algunas cosas (según la edad). Hazles sentir que son capaces, que ellos pueden y que no es necesario que estés todo el tiempo a su lado. De éste modo también ayudarás a elevar su auto-estima.
- No seas controladora, deja que disfruten, exploren y simplemente vivan.
- Cuida tus expectativas; son tuyas, no de ellos. Tú has vivido esa etapa, permite ahora que ellos tengan criterio propio y puedan inclinarse a hacer actividades que les agraden aunque no sea lo que tu esperabas o quisieras.
- Aprende a respetarlos.
Si quieres más consejos para dejar de ser una madre sobreprotectora, lee nuestro artículo Consejos para madres sobreprotectoras.
Aunque seas su madre y los niños deban obedecerte, recuerda que poco a poco van creciendo y tienen derecho a formar su propia personalidad, carácter, y a tener también sus opiniones por mucho que éstas difieran de las tuyas. Si crees que deben hacer lo que tú dices por el simple hecho de que así te sentirás segura de que nada les pasará, vuelves a caer en el mismo patrón sobreprotector.
¿Crees que eres una madre sobreprotectora? ¡Cuéntanos tu experiencia!









