8 cosas que solo las madres de niños varones entenderán

Todas las veces que me imaginé siendo madre pensé en dibujos animados en el sofá, vestidos, películas de Disney, cenas en familia tranquilas, juguetes por toda la sala... Me imaginé la maternidad con felicidad, amor y mucha, mucha paz...

Luego, tuve varones y supe que eso solo había sido una linda e imposible fantasía. Seguro me entiendes y también sabes de estas 8 cosas que solo las madres de varones podemos entender. 

#1 Todo está cubierto con pis

Si su padre tuvo la genial idea de decirle que los hombres podían hacer pis donde sea, lo recordarán y seguirán al pie de la letra.

Pis en la tapa del inodoro, pis en la tina, pis en el piso del baño... Por lo visto acertar en el hoyo del inodoro es más complicado de lo que la ley de gravedad indica. 

#2 La ropa no significa nada 

Sí, antes de ser madre soñaba en comprar cosas bonitas para ellos cuando veía ropa de niños y bebés, luego aprendí que los varones rompen todo lo que les compras y no les importa nada.

Cualquier sudadera, camisa o jean quedará rasgado, manchado de césped, comida, y otros orígenes indescifrables. Eso sí, aprendí que... 

#3 Se puede quitar una mancha de lo que sea en donde sea

¡Bingo! ¿Pensabas que no? Lo descubriste siendo la mamá de varones. Hasta las manchas menos imaginables aparecerán en tu sofá, en el piso, en las paredes, en la ropa, en los juguetes...

Podría seguir hasta mañana, pero creo que debemos continuar, ¿no?

#4 Cualquier cosa se vuelve una pistola 

Lo que sea, tenga la forma que tenga; un plátano, el rollo de papel higiénico, el cepillo de dientes, sus propios dedos... Por más que quieras no inculcar la violencia, ellos aman las pistolas.

Por eso trato de hablarles del verdadero peligro del uso de las armas y el respeto por la vida de los demás, pero ya no grito ni me estremezco cuando los veo jugando en la ducha a que el recipiente de shampoo es una pistola. 

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#5 Los varones no escuchan 

Igual esto ya lo sabía y tú también, ¿no? Pensé que era solo cosa de los adultos, pero aprendí que es del género masculino.

Hasta el día en que prácticamente me quedé sin cuerdas vocales, no entendí el verdadero significado de esto y de que no es su culpa, ellos son así. 

#6 Pelear murmurando no es pelear

Dos por tres los pesco en actitud sospechosa peleando a los murmullos, les encanta hacer eso cuando vamos en el coche. Sin embargo, cuando les pido que no peleen, dicen que solo estaban charlando, pero siempre el murmullo termina en lágrimas. ¿Te suena familiar?

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#7 Todo es una competencia

Y siempre una competencia importante y de vida o muerte. ¡No puedo creerlo! Desde quién es el que corre más rápido, pasando por quién come todo el plato de comida, hasta quién encuentra el mejor palo que parezca una espada para jugar en el parque.

No hay nada que hagan que no sea competencia. Y debo confesar que a veces la uso a mi favor, como cuando necesito que se vistan rápido para el colegio. 

#8 Las flatulencias son graciosas 

Sí, a los varones les gusta cultivar el arte de las flatulencias y desde bien pequeños. Cuanto más prolongado y ruidoso, mejor. ¿Adivina qué? Eso también es parte de una competencia.

¿Has visto como solo las madres de varones entienden estas cosas? Sabía que tú lo harías.

Aquí te dejo algunos consejos sobre cosas que no debemos decirles a nuestros hijos varones, quizás te ayuden como me ayudaron a mí.