El salvado es el resultado de una parte de la molienda de los granos de cereales.
Salvado, adelgazante natural

En la actualidad se ha hecho frecuente el uso del salvado debido a la gran cantidad de nutrientes y fibras dietéticas que contiene, y lo convierte en especialmente apta para una nutrición mas completen la dieta alimenticia de las personas.
Una cucharada de salvado proporciona una tercera parte del requerimiento diario de fibra (20 gramos). Lo cierto es que el salvado tiene múltiples beneficios para nuestra salud y organismo, entre otras, reduce el riesgo de desarrollar cáncer de colon.
Asimismo, y gracias a su alto contenido de fibras es ideal para evitar el estreñimiento o las hemorroides (inflamación del intestino).
El salvado de avena, por su parte, contiene fibra soluble que tiene la cualidad de poder ligarse al colesterol haciendo que se elimine más fácilmente como residuo, en lugar de ser absorbido, por este motivo, es altamente recomendable para personas que sufran de colesterol elevado.
El salvado adelgazante natural, ya que cuando la fibra absorbe líquido en nuestro estómago se expande hasta nueve veces produciendo una importante sensación de satisfacción, de tal manera, de tal manera que sentimos la misma saciedad al comer un fuerte almuerzo, que con una pequeña porción de alimento acompañada de pancitos de salvado, por ejemplo, una opción muy sana para ingerir menor cantidad de alimentos de una manera natural.
La fibra soluble permite barrer con los excesos de grasas en nuestro cuerpo, tanto en el exterior como en el interior, de esta manera podemos reducir de peso, sin pasar hambre, además de obtener un gran aporte de nutrientes.
Puede ingerirse mezclando los granos con la leche o con el yogur, junto con los cereales en el desayuno, en ensaladas o licuados de frutas, en la elaboración de postres caseros como una torta, magdalenas, o simplemente en unos deliciosos panes de salvado.
La ingesta adecuada de salvado de trigo se establece entre los 20 o 30 gramos al día. Si se exagera su consumo podrán presentarse flatulencia, distención abdominal y digestiones pesadas. Además el salvado de trigo contienen en su composición fitatos, unas sustancias que consumidas en exceso pueden impedir la absorción de hierro y calcio a nuestro organismo.
Compartamos una receta de panes de salvado, una manera fácil de incluir este beneficioso nutriente en nuestra dieta.
Harina: 200 gr
Salvado de trigo: 200 gr
Sal: 1/2 cucharadita
Levadura: 50 gr
Azúcar: 1/2 cucharadita
Manteca: 30 gr
Agua: 250 cl.
En un bol mezcle la harina con el salvado y la sal, forme una corona. En otro bol más pequeño, desmenuce la levadura, añada el azúcar y el agua tibia. Disuelva mezclando. Vierta la mezcla en el centro de la corona, con la cuchara vaya incorporando la harina de a poco, formado un bollo. Añada la manteca derretida a temperatura ambiente.
Enharine el interior de una bolsa de plástico, coloque el bollo y amase unos 10 min. hasta que este liso y elástico.
Coloque nuevamente en el bol, tape con la bolsa y deje reposar en ambiente cálido, hasta que el bollo duplique su volumen, por lo menos 1 h.
Cuando haya leudado, divida la masa en 2, unte los moldes con aceite, coloque los panes, pinte la superficie con manteca o aceite y deje leudar nuevamente, hasta que hayan duplicado su volumen, mas o menos 40 min.
Cocine 15 min. al máximo, baje el horno a temperatura media y deje cocer 15 min.
Entonces, empieza ya a cuidarte y verte bien con una fuente de nutrientes, el salvado.









