Perdonar trasciende el mero hecho de aceptar un “perdón”. De hecho, consiste en un estado mental libre de resentimientos y otros pensamientos negativos. Ahora bien, ¿sabías que esta disposición interior de aceptación conlleva beneficios tanto mentales como físicos? Pues, sí: perdonar mejora la calidad de vida.
Perdonar mejora la calidad de vida

Atenúa el estrés

De acuerdo a un estudio realizado por el Hope College, el perdón reduce los niveles de cortisol –hormona producida por la glándula suprarrenal y liberada en respuesta del estrés. Así, el equipo de investigación se dedicó a analizar las reacciones físicas de un grupo de 71 personas. Constató que quienes hablaban del perdón y la empatía tenían niveles de cortisol más bajos que aquellos aún atrapados por el resentimiento.
Beneficia el corazón

Un estudio publicado en la International Journal of Psychophysiology evidenció que las personas rencorosas tendían a poseer un ritmo cardíaco más alto –hecho que traduce un gran esfuerzo del corazón–, mientras que aquellas capaces de sentir empatía y perdonar conservaban uno más bajo. Esto significa que el resentimiento, al sobre exigir al corazón, puede acortar la vida sana del sistema cardíaco.
Acaba con el dolor

De acuerdo a una investigación realizada por Duke University Medical Center researchers sobre 61 individuos que sufrían de dolor de espalda crónico, aquellos más propensos a perdonar y a llevar una vida libre de resentimientos reportaban menos dolor que aquellos que optaban por el rencor.
Prolonga la vida

Como si todo lo anterior no bastara, el perdón también tiene el potencial de prolongar la vida. Así lo demostró un estudio reciente; este se centró en evaluar la capacidad de perdonar de 66 adultos mayores y concluyó que aquellos que contaban con una mejor habilidad de perdonar tendían a vivir más.
¿Alguna vez habías sospechado que perdonar encerraba tantos beneficios? Pues, ahora que los conoces, tendrás que hacer tu mayor esfuerzo para disfrutarlos. Después de todo, no solo estarás ganando en cantidad de vida, sino más que nada en CALIDAD.









