Para la locura: 5 hábitos que seguro tienes y aumentan tus niveles de estrés

Con el acelerado estilo de vida moderno, el estrés es uno de los problemas de salud más serios que debemos enfrentar. Para la Organización Mundial de la Salud, el estrés es una de las principales causas de discapacidad en el mundo. Los números son claros: el 75 % de las personas sufren estrés. En los ambientes laborales, este número sube al 80 %.

La preeminencia del estrés no es casualidad: muchos de nuestros hábitos diarios contribuyen a potenciarlo.

El exceso de tecnología 

Muchas veces, los pequeños detalles (como estar esperando a que alguien nos conteste en WhatsApp) pueden generar ansiedad, que a su vez puede derivar en un cuadro de estrés. 

Asimismo, el uso de tecnología antes de dormir puede minar la calidad del sueño. Las computadoras y los celulares nos desvelan, sobre todo porque la luz intensa de la pantalla le indica a la parte primitiva del cerebro que aún es de día.

Las compras compulsivas

Muchas veces, los síntomas de ansiedad culminan en compras compulsivas. Algunas personas gastan más dinero del que tienen para obtener un placer momentáneo, que luego les termina provocando estrés en la medida en que se generan un compromiso a largo plazo que les preocupa.

Trasladarse en las horas pico

Trasladarse en las horas pico implica lidiar con embotellamientos o un tránsito lento, todo lo que hace perder tiempo, atenta contra la puntualidad y dispara los niveles de estrés. 

Buscar rutas alternativas menos concurridas o salir de casa con más tiempo puede son dos buenas soluciones a esta problemática.

Beber café o similares en la noche 

Por un lado, beber café por la noche puede resultar en insomnio. Y las malas noches de sueño aumentan el estrés. 

Por el otro, los refrescos carbonatados o las bebidas con mucha azúcar también pueden generar  problemas para dormir. También, si te acostumbras a beber estos refrescos y luego los sustituyes por agua u otros líquidos naturales, el cuerpo puede  sentir cansancio o irritabilidad.

La famosa procrastinación  

La procrastinación, también conocida como «el mal del siglo XXI», es el hábito de posponer o retrasar indefinidamente aquellas tareas importantes. Cuando se vuelve habitual, la procrastinación puede generar estrés, pues inhibe la capacidad de concretar los planes.

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