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La crítica de un profesor la hizo dudar de sus capacidades, ¡pero ella no se rinde!

Tiffany Martinez es una excelente estudiante de la Universidad de Boston, tal como su nombre lo indica es de origen Latino, pero nació y se crió en Estados Unidos (en el Bronx).

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Es una apasionada por el servicio a la comunidad y es activista por los derechos humanos, específicamente de los inmigrantes.

Hace algunas semanas esta chica entregó un análisis literario para la Universidad y cuando su profesor se lo devolvió el resultado fue totalmente inesperado.

Parece ser que la apariencia de Tiffany es un determinante para producir conocimiento de calidad. Fue así que su profesor de la Universidad la llamó delante de toda la clase y le dijo “este no es tu lenguaje”; lo dijo en un tono tan alto que todos sus compañeros de clase notaron que algo sucedía.

Pero lo peor no fue eso, cuando Martínez comenzó a chequear su trabajo notó que los comentarios racistas iban en aumento. En la primera página de su trabajo, su profesor escribió:

“Por favor, cuando tengas un momento ven y dime de dónde copiaste esta información”.

Esta persona asumió que esta chica NO era capaz de producir un análisis de buena calidad. Sin consultar las fuentes y chequear el trabajo realizado, el académico de la Universidad de Boston no tuvo reparo en faltarle el respeto a esta estudiante con sus dichos.

En el trabajo de Tiffany estaba marcado con un círculo la palabra “HENCE” (por lo tanto) y al lado de la palabra decía: “Este no es tu lenguaje”.

Su profesor entendió que alguien con las características de Martínez no podía utilizar ese tipo de lenguaje en un ensayo académico.

Tiffany, cuando recibió su trabajo solamente pensaba en su profesor leyendo su ensayo y diciendo : “¿Podría alguien como ella escribir algo así?”. En su blog  Viva Tiffany, ella escribió:

“El profesor leyó algunas páginas de mi ensayo que reflejaban mi comprensión por las teorías sociológicas complejas y decidió invalidarlo todo. Su pluma azul fue catalizadora, abrió un océano de dudas que he trabajado duro para destruir. Delante de mis compañeros me criticaron. Estoy sufriendo porque mi profesor asume que la única manera de que pudiera producir un contenido tan bueno como este era haciendo plagio. Sufro porque en algún momento me lo creí”.

Sin embargo, este hecho racista (y repudiable) lejos de alejar a Martínez de sus sueños, la acercó aún más. Tiffany quiere ser profesora para poder educar desde la igualdad, desea estar en la cuna de producción de conocimiento. Sostiene que nadie debe ser capaz de alejarte de tus sueños y que nadie puede hacerte sentir tan insignificante y tonta como lo hizo este profesor con ella.

“Mi dolor no puede ser universalmente entendido y hasta que sea, tengo que seguir luchando. En este momento, hay estudiantes que no entenderán la desolación que sigue de un subrayado NO.”

De esta forma, esta joven académica muestra que rendirse no es una opción, el camino que está delante de nosotros es el que tenemos que recorrer. No importa cuánto dure el camino, o cuán difícil será completarlo.

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Tiffany Martínez se sintió como una latina tonta, pero eso no la limitó para darse cuenta de la realidad y seguir luchando por los derechos de todas las personas por igual.

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