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chakras

El tratamiento de la cromoterapia

Publicado 12 Oct 2007 – 09:07 AM EDT | Actualizado 5 Abr 2018 – 01:47 PM EDT
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Ya hablé de qué es y cómo opera la cromoterapia sobre nuestro cuerpo. Ahora le toca el turno al tratamiento de cromoterapia. ¿Bata con pararse frente a una sábana roja o turquesa y mirarla para que la cromoterapia actúe sobre nosotros?

No. La cromoterapia debe iniciarse con una actitud por parte del paciente. Esta actitud implica relajamiento y concentración: entrega a la terapia.

El concepto de Chakra juega un rol importantísimo en el tratamiento por cromoterapia. Los chakras son canalizadores de la energía de nuestro cuerpo, que si giran en un sentido absorbemos energía, mientras que si giran en sentido contrario, perdemos energía.

La cromoterapia actúa sobre nuestros chakras revitalizándolos; dirigiendo nuestros colores hacia nuestros chakras logramos una armonía externa. La clave del uso de la cromoterapia para nivelar nuestros chakras es hacerlos girar con velocidad.

Pero como decía más arriba, la cromoterapia no consiste en mirar un color. Debemos tener condiciones desde emocionales hasta materiales para poder llevar a cabo esta terapia en forma correcta. Una habitación totalmente blanca es ideal para la cromoterapia, ya que cualquier color que se proyecta en forma de luz dentro de ella, se expande por toda la habitación, sumergiéndonos en su luminosidad.

También se pueden aplicar los colores a zonas determinadas del cuerpo. Se aplican los colores diariamente durante 30 minutos. A los 15 días se comenzarán a sentir las mejorías.

También pueden llenarse de agua botellas envueltas en papel celofán de color, dejarlas al sol durante cuatro horas antes de tomarlas, e ingerirlas preferiblemente en ayunas y a sorbos.

VIA | Mantra

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