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¿Crees que la vida no es justa? Esto es lo que puedes hacer para cambiarlo

¿Cuántas veces te ha pasado que cometen una injusticia contra ti y te resientes pensando que la vida no es justa? Es más, hay personas que se pasan toda la vida envidiando a quienes tienen más que ellas – desde una pareja amorosa hasta una casa hermosa o un empleo admirable – y vociferando a los cuatro vientos que la vida es injusta con ellos.

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Es más, muchas veces cuando vemos una situación de esas que nos tocan el corazón, como ir caminando por un barrio rico y ver personas revolviendo la basura para comer, lo primero que pensamos es que la vida no es justa. ¡Todas esas personas viviendo en lujosas casas y apartamentos, con coches caros y ropa de marca, y a su lado personas que no tienen qué llevarse a la boca!

Ser o no ser… generoso

Imagen Thinkstock

Es una situación muy triste y aparentemente muy injusta, y sin embargo… cada vez que piensas eso, ¿qué haces al respecto? Porque he tenido esta charla muchas veces con amigos y familiares, que se quejan de que los ricos tienen demasiado, que deberían compartir con los más necesitados, que el gobierno debería sacarles a los ricos para darlo a los pobres (al mejor estilo Robin Hood), y frases de ese tipo.

Entonces les pregunto: ¿y ustedes qué están dando? Porque a los ojos de esas personas extremadamente pobres, ¡nosotras somos ricas! Si tienes una casa (no importa si es propia o alquilada) que te protege de las inclemencias del tiempo, donde puedes darte una ducha caliente e ir al baño sin tener que salir al exterior; si tienes dinero en el banco (incluso si tienes una cuenta bancaria); si tienes alimentos en el refrigerador y la alacena; y si incluso puedes darte pequeños gustos como tomar un helado, ir al cine de vez en cuando o tener Internet en tu hogar, ¡eres rico!

Y siendo rico, perfectamente podrías compartir lo que tienes con los pobres y menos afortunados. Porque algo curioso que descubrí al hablar con las personas que quieren más “justicia social” es que en realidad lo que quieren es que les saquen dinero a OTRAS personas, pero nunca a sí mismos (confieso que jamás escuché a nadie decir “yo debería pagar más impuestos para mejorar el país", o "debería estar aportando más a la sociedad”). Y muchas veces lo que quieren es RECIBIR, pero no dar. Por eso el mundo está como está. 

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Descúbrelo: La ciencia responde: ¿la generosidad es contagiosa?

¿Qué puedes hacer para contribuir a la justicia?

Imagen iStock

Ahora vamos a lo práctico, a qué puedes hacer para aportar tu granito de arena que ayuda a cambiar las injusticias del mundo: empieza a compartir. Ahora, ya, lo que tengas. No lo que te sobra, sino a compartir realmente lo que tienes. 

Hace una semana lo viví en carne propia y entendí el verdadero concepto de justicia social. Estoy trabajando junto a otras personas como voluntaria en un hostel, y al mediodía el dueño compró comida para todos. Había una pareja que estaba realmente hambrienta, pero por azar a ellos les tocó un pequeño sándwich mientras que a mí me tocó una gran ensalada con pollo. Era una situación en la que se estaba cometiendo una injusticia, no en mi contra, ¡sino a mi favor!

Yo podría haber dicho “¡qué suerte tengo!”, y comerme tranquilamente la ensalada sin pensarlo mucho. Y sin embargo, sabía que eso no era lo correcto, que esa situación no era JUSTA (aunque me beneficiaba, porque me tocaba comer más y mejor, y realmente tenía hambre.) Pero para ellos no era justo (aunque no dijeron nada). Así que, en contra de mis egoístas instintos de supervivencia, les ofrecí cambiar la mitad de mi ensalada por la mitad de su sándwich, así todos comíamos la misma cantidad. 

Y esta es la moraleja de mi historia: la vida no es justa, pero tú puedes hacer que sea un poco más justa. Puedes empezar a hacerlo hoy mismo, compartiendo parte de lo que tienes con personas que tienen menos. Porque a veces la vida no es justa porque TÚ estás recibiendo demasiado. Lo que hagan los ricos, lo que haga el gobierno, es problema de ellos. Pero tú… tú puedes hacer la diferencia HOY mismo. Empieza a compartir

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Y para hacer del mundo un lugar más justo, tenemos que enseñar a las nuevas generaciones a ser más generosas y compartir. Por eso es importante que prestes atención a estas 5 señales de que podrías estar criando a un hijo egoísta.