Tips básicos para proteger la piel muy clara

Proteger la piel debe ser un hábito diario para todas; sin embargo, a pesar de incluirlo en la rutina básica de cuidados, quienes tenemos piel demasiado sensible o clara requerimos de un plus en nuestro ritual de protección.

Si tu piel se reseca con facilidad, te da picazón y ni hablar del daño que recibes por el sol, entonces toma nota de los siguientes consejos que pueden ayudarte a minimizar los efectos y protegerte de los mismos.

Hábitos que marcan la diferencia

Las pieles claras son más susceptibles a los rayos UV,  por lo tanto la principal regla es el uso de protector solar de cajón. Para nosotras no hay opción y así como hidratamos diariamente nuestra piel, hay que protegerla con filtro solar.

Mientras más clara sea tu piel y más expuesta estés al sol debes considerar el factor de protección solar, además de complementar tu kit con una crema con protector UV y maquillaje con filtro. Incluso si estás en el interior debes proteger tu piel pues la luz blanca también afecta aunque en un grado menor.

Además del sol, otro enemigo de las pieles muy claras que por lo regular son hipersensibles, son los productos tópicos. Si has notado algún tipo de irritación sin causa aparente, esta puede ser provocada por los productos que usamos y que parecen inofensivos. Desde cremas, maquillaje, lociones, etc.

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Para evitar malos ratos, procura utilizar siempre productos hipoalargénicos, Y haz un test en una zona pequeña para descartar reacciones. Si utilizas algún tratamiento aclarante o exfoliante por ejemplo, hazlo siempre de noche pues tu piel se vuelve más susceptible a mancharse con el sol.

Utiliza los remedios adecuados para problemas tópicos como espinillas, heridas, alergias, incluso picaduras de mosquitos, todo aquello que pueda dejarte una cicatriz o mancha muy visible por el tipo de piel.

Como un plus extra...

Cuando tenemos la piel muy clara, ésta puede llegar a tener tonos irregulares mucho más visibles que en otros tipos de piel debido a los factores antes mencionados. Así que además de protegerla, podemos recurrir a cremas que ayuden a emparejar los tonos o tratamientos naturales.

• Colócate compresas con té de manzanilla o las mismas bolsitas escurridas sobre los párpados y en la zona de las ojeras para ayudar a aclarar la zona.
• De vez en cuando aplícate un exfoliante con bicarbonato de sodio y limón en las comisuras, nudillos, codos y rodillas para blanquear (hazlo de noche).
• Olvídate de las camas bronceadoras o posarte horas al sol para cambiar tu color.

Si bien los medios nos hacen siempre refunfuñar contra lo que la naturaleza nos dio, es sabio aceptarnos como somos y claro, la moda siempre cambia y llegará un punto en que apreciarás más tu tono natural de piel. ¿Te sabes otro tip?

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