En el mundo de la belleza, la regla de oro para tener una piel radiante, tersa, pero sobre todo sana, es una buena limpieza y el primer paso es siempre, sí o sí, sin importar nada, ¡desmaquillarte!
Mousse, aceite o bálsamo: te decimos qué tipo de desmaquillante te funciona mejor según su textura
En el mercado hay diferentes tipos de desmaquillantes y encontrar el perfecto para ti dependerá de tu estilo de vida, cuántos pasos quieras seguir, la textura que prefieras, si utilizas maquillaje a prueba de agua o no, si llevas un look natural o recargado, y claro, tu tipo de piel.
Sigue leyendo para que descubras qué desmaquillante es para ti y qué textura es la que más te beneficia.
Tipos de desmaquillantes según su textura
Desmaquillante en jabón
Para las mujeres que aman hacer ejercicio y tienen mil actividades al día.
El desmaquillante en jabón es el más usual y muchos ya contienen agentes limpiadores e hidratantes por lo que las pieles secas lo pueden utilizar sin problemas. Este debe aplicarse sobre el rostro seco, dar un suave masaje para remover el maquillaje (no lo uses para desmaquillar los ojos) y después debe retirarse cuidadosamente con un algodón húmedo o con abundante agua.
Desmaquillante en aceite
Para las mujeres que les gusta darse un tiempo y hacer su rutina de limpieza completa.
Perfecto para pieles normales a secas. Su consistencia es perfecta ya que atrapa las impurezas de los poros y de la superficie de la piel, dejándola limpia, suave e hidratada y con un aspecto glowy. Recuerda que cualquier aceite desmaquillante debe enjuagarse con abundante agua.
Desmaquillante en mousse o espuma
Para las mujeres ocupadas que van a la escuela u oficina y necesitan un limpiador eficiente.
Si tienes piel seca, sensible o con tendencia al acné, esta textura ligera y espumosa te caerá de maravilla. Otra cosa que tienen a su favor este tipo de desmaquillantes es que puedes usarlos sobre la piel seca o mojada y arrasará con cualquier tipo de suciedad, maquillaje e impurezas.
Desmaquillante bifásico
Para ti que amas maquillarte y utilizas sombras y labiales en colores intensos y waterfproof.
Este desmaquillante está formado por dos componentes, uno acuoso y otro oleoso. Para poder incorporar ambos solo hay que agitar el envase antes de utilizarlo y aplicar el producto con un pad desmaquillante. Esta textura es la mejor para eliminar maquillaje a prueba de agua y puede ser utilizada en todo tipo de piel.
Desmaquillante en crema
Eres amante de la rutina y prefieres un producto que te brinde dos beneficios en uno.
Este es el desmaquillante por excelencia que han usado las mujeres a través del tiempo, solo que antes las cremas no tenían los agentes limpiadores que tienen ahora. Además, las cremas de hoy, además de desmaquillar, aportan hidratación extra evitando la sensación de tirantez y sequedad.
Lo mejor de todo es que puedes encontrar diferentes versiones dependiendo tu tipo de piel (seca, mixta, grasa o normal).
Toallitas desmaquillantes
Cada noche llegas agotada y necesitas limpiar tu rostro de una manera rápida y efectiva.
Son perfectas para esas noches que llegas de fiesta o muy cansada y no tienes ganas de hacer tu rutina de limpieza completa. Las toallitas son muy prácticas ya que están impregnadas de desmaquillante, por lo que remueven todo a la perfección y una sola suele ser más que suficiente, pero si llevas demasiado makeup lo más probable es que necesites dos. Están pensadas para todo tipo de piel.
Desmaquillante en bálsamo
Para ti que buscas una sensación extra humectante después de desmaquillarte
Este es un desmaquillante con textura muy espesa; básicamente es como una barra de mantequilla que se va derritiendo conforme lo vas manipulando con tus dedos y tiene contacto con la piel del rostro.
Es ideal para retirar todo el maquillaje sin necesidad de re aplicar y aunque su textura es pesada, no deja sensación grasosa pues al enjuagar y tener contacto con el agua, emulsiona. No se recomienda para las pieles grasas o con tendencia al acné.
Agua Micelar
Casi no te maquillas y si lo haces siempre buscas un look natural. Buscas siempre limpiar tu piel.
Aunque no es en sí un desmaquillante, su fórmula es perfecta como primer paso de limpieza (te maquilles o no). Sus micelas encapsulan las impurezas y los residuos de maquillaje limpiando los poros de tu rostro.
El agua micelar es perfecta para las pieles grasas pues arrasan con el sebo innecesario del cutis. Si en alguna ocasión decides usarla como único paso de limpieza, asegúrate de no detenerte hasta que los pads salgan completamente limpios.
Y recuerda, antes de irte a dormir el primer paso es desmaquillar tu piel, luego lavarla, después tonificarla y por último, humectarla. Si solo desmaquillas no estarás acabando por completo con la suciedad en tu piel.
mini:
¡No te vayas, sigue leyendo!