La piel es un reflejo de nuestra salud interna. Es el órgano más grande de todos y el que mostramos al mundo. Tener una piel tersa, suave y sana no siempre es fácil, pero con constancia y dedicación puedes conseguirla. Con los hábitos adecuados, también es posible retrasar el envejecimiento. Checa estos tips que te ayudarán a lograrlo.
Comer frutos secos y otros hábitos que te ayudarán a tener una piel más suave
Por:Daniela Flores
#1 Identifica tu tipo de piel
Existen distintos tipos de pieles y cada una tiene necesidades diferentes. La piel seca se caracteriza por sentirse acartonada después de lavarla y suele resecarse fácilmente.
La piel normal generalmente se siente aterciopelada y suave, no suele tener imperfecciones o son muy poco frecuentes. La piel grasa produce una mayor cantidad de sebo y es más probable que tenga presencia de acné. Por último, la piel mixta puede combinar el cutis graso y seco, en diferentes zonas.
#2 Rutina de skincare
Algo obligado para una piel tersa, es tener tu propia rutina de cuidado de la piel. Los productos necesitan tiempo para tener efecto en la dermis, por lo que debes hacerlo diariamente.
Las rutinas constan principalmente de limpiador facial, crema de ojos, tónico, sérum, hidratante y una mascarilla. Algunas rutinas, como las asiáticas, tienen hasta diez pasos.
#3 Revisa los ingredientes
A veces nos dejamos llevar por los productos comerciales y pensamos que son totalmente benéficos. Pero algunos ingredientes químicos pueden estar dañando nuestra piel.
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Debes revisar que tus productos no contengan ingredientes dañinos, como alcohol o parafina, ya que pueden resecar severamente tu dermis y perjudicarla.
#4 Come frutos secos
La alimentación también es clave para tener una piel suave no sólo en el rostro, sino en todo el cuerpo. Una gran opción son los frutos secos, y son aún mejor si se mezclan.
Por ejemplo, las nueces de Brasil son ricas en selenio, el cual incrementa la elasticidad de la piel. Las nueces contienen ácidos grasos Omega 3, muy buenos para la piel.
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#5 Olvídate del limón
El limón está presente en muchas mascarillas y remedios naturales para la piel, sobretodo en aquellas que se utilizan para aclarar. Pero no es muy recomendable usarlo.
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El jugo del limón puede dañar tu piel a corto y largo plazo, al igual que otros cítricos como la naranja. El limón puede romper el manto ácido de la piel, el cual es muy importante, pues la protege de bacterias. Además, puede provocar sarpullido y quemaduras.
#6 Mascarilla de piernas
La piel suave no es exclusiva del rostro, es algo que incumbe a todo el cuerpo. Otra zona que las mujeres solemos exponer al sol, la contaminación, etc. son las piernas, por lo que no está de más darles algunos cuidados.
Para cuidar esa zona de la piel, puedes aplicarte una mascarilla de piernas. Necesitas: 1/2 taza de aceite de almendras, 1 aguacate, 2 cucharadas de miel, 5 gotas de aceite de rosas y 4 de aceite de naranjo. Mezcla todo hasta tener una pasta y aplica desde los tobillos hasta las rodillas.
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Ponte unas calcetas largas y mantén las piernas sobre una almohada. Deja reposar toda la noche y enjuaga por la mañana.
#7 Agrega vitamina E
La vitamina E tiene un efecto antioxidante sobre la membrana de nuestras células, protegiéndola ante los ataques de los radicales libres. Retrasa el envejecimiento y ayuda a que nuestra piel, cabello y uñas se mantengan fuertes y saludables.
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Se dice que después de los 14 años, necesitamos 15 miligramos de vitamina E al día. Puedes ingerirla en cápsulas, o bien, sacar el líquido y mezclar con tu crema humectante para el cuerpo.
#8 Aléjate del alcohol
Aunque es un estimulante social en las fiestas y reuniones, el alcohol tiene un beneficio nulo en nuestro organismo. Además, uno de sus efectos negativos se refleja en la piel.
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El alcohol ocasiona una deshidratación en nuestro organismo y esto genera una piel seca. Los excesos nunca son buenos, así que procura consumirlo con responsabilidad.
#9 Cambia las fundas de tu almohada
Por más que limpiemos nuestra piel y cabello, la almohada y sábanas de nuestra cama pueden acumular células muertas, bacterias, sudor y ácaros.
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Por ello, es recomendable cambiar toda la ropa de cama por lo menos una vez a la semana. Así evitarás resequedad, puntos negros, espinillas y brotes de acné.
#10 Hábitos en la ducha
Ducharse es una actividad muy relajante y satisfactoria, sobretodo cuando las temperaturas son altas. Pero aunque no lo creas, no es recomendable hacerlo tan frecuente.
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Los químicos del jabón pueden resecar tu piel significativamente. Lo recomendable es bañarse 1 día sí y otro no, o bien solo una vez al día.
Si acostumbras ducharte dos o más veces diarias, te recomendamos que uses jabón solo la primera vez y las demás ocasiones te duches nada más con agua. No olvides aplicar tu crema humectante después de cada baño.
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#11 No olvides el protector solar
Es muy común que olvidemos integrar el protector solar en nuestra rutina de belleza. Pero es el elemento primordial del cuidado de la piel de todo el cuerpo.
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El protector solar te protege de los rayos del sol, que pueden provocar quemaduras, irritación, alergias, resequedad, arrugas y en los casos más severos, cáncer de piel.
#12 Agrega ácido hialurónico
El ácido hialurónico es una sustancia que nuestro cuerpo produce de manera natural. Se encuentra en numerosos tejidos y órganos del cuerpo humano, especialmente en la piel.
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Sin embargo, con el tiempo nuestro organismo va aminorando su producción y esto puede provocar deshidratación y falta de elasticidad. Afortunadamente, existen muchos productos comerciales que contienen este elemento y te ayudarán a mantener una piel hermosa.
#13 El agua fría será tu mejor amiga
Bañarse con agua caliente puede ser algo muy placentero, pero no es lo mejor. El agua caliente puede provocar várices, acelera el envejecimiento de la piel y maltrata tu dermis y cabello, pues dilata los poros.
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En cambio, el agua fría cierra los poros y ayuda a estimular la circulación sanguínea de todo el cuerpo. No tienes que congelarte en la ducha, sólo bañarte con el agua más fría que puedas soportar.
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#14 Cepilla tu piel
¡Sí! Por más extraño que parezca, este es un hábito que te ayudará a conseguir una piel radiante. Sólo debes cepillar todo tu cuerpo, de pies a cabeza, con un cepillo especial que venden en cualquier farmacia o tienda de belleza.
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Esto te ayudará a eliminar la piel muerta de todo el cuerpo. Fomentará la circulación sanguínea y drenaje de los ganglios linfáticos. Incluso evita la celulitis. El cepillado debe hacerse en seco, sin nada de agua de por medio.
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#15 Haz ejercicios faciales
Nuestro rostro también necesita ejercitarse para mantenerse saludable. Esta zona es una de las que más cambios tiene, pues es donde las emociones se reflejan.
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Para fomentar la circulación y lucir un rostro más iluminado, haz lo siguiente: mueve tu boca como si quisieras decir las vocales de una forma exagerada. Llévalo a cabo durante 3 minutos.
#16 Ante los problemas, asiste al dermatólogo
Las redes sociales y el Internet pueden ser una gran ventaja para mantenernos informados y actualizados. Es común que ante cualquier inconveniente, recurramos a ellas para pedir consejo.
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Pero no hay nada mejor que un dermatólogo para analizar los problemas de tu piel. Si presentes acné, alergia o cualquier problema, haz una cita y sigue las instrucciones del especialistas.
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También es recomendable asistir una o dos veces al año cuando no presentas nada anormal, sólo para asegurarnos de que todo está en orden.
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#17 Descansa de tu celular
Quizá este consejo suene descabellado, pero la luz que tu celular emite puede dañar tu piel más de lo que imaginas. Así que es hora de alejarte un poco.
Estos dispositivos emiten una luz artificial que también reflejan rayos UV, los cuales son muy dañinos para la piel. Lo mismo pasa con las tabletas, computadoras y televisores.
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Esto puede provocar envejecimiento prematuro, arrugas y manchas en la piel. Si su uso es indispensable para ti, procura descansar de él cuando no sea necesario.
#18 Spa casero
El estrés que vives diariamente también se ve reflejado de manera negativa en tu piel. Es necesario olvidarte del mundo aunque sea un día a la semana y darte un tiempo para ti.
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Para lograr relajarte, puedes hacer tu propio spa en casa. Sólo debes colocar aceite de rosas y naranjo (o cualquier otro aceite esencial que te agrade) en una tina con agua templada.
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Coloca velas, aromatiza el lugar con lavanda y pon una luz tenue. Reproduce tu música favorita y sumérgete. No olvides consentir a tu rostro con una mascarilla.
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#19 Mantente activa
No sólo se trata de ser fiel a tu skincare, también debes mantenerte activa y en movimiento para que todo tu organismo, incluyendo la piel, esté saludable por completo.
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El ejercicio nos ayuda a eliminar toxinas e impurezas a través del sudor. Además, contribuye a que nuestras células reciban mayor oxígeno. No tardarás en notar los resultados.
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#20 Duerme temprano
Aunque no lo creas, dormir adecuadamente es uno de los mejores tratamientos de belleza. Durante el día, la piel trabaja para protegerse del sol, del viento, la contaminación y el estrés.
La noche es su momento para regenerarse y descansar como es debido. Privarte del sueño provoca que la circulación disminuya, lo que te hará ver pálida e hinchada.
#21 ¡Sonríe!
La risa es uno de los mejores estimulantes naturales. Activa los músculos faciales, genera endorfina y nuestra piel luce mucho más luminosa y brillante.
#22 ¡No te olvides de hidratarte!
Tal vez ya te cansaste de escuchar este consejo, ¡pero es indispensable y totalmente cierto! El agua garantiza un funcionamiento correcto y saludable de nuestro organismo.
Lo recomendable es beber 2 litros u 8 vasos de agua al día, aunque también se toma en cuenta el líquido que contienen los alimentos. Si te cuesta trabajo tomar agua simple, puedes agregar frutas como fresas, moras, naranja, entre otras. Tendrá un delicioso sabor y será mucho más fácil.
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#23 Pon atención en tu dieta
Si ya hiciste todo lo anterior y tu piel aún está reseca, el origen puede estar en lo que comes. No dudes en incluir alimentos saludables en tu dieta cotidiana.
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Procura que lo que consumas no tenga una gran cantidad de sal ni grasas, pues van afectando tu piel y tu organismo paulatinamente. No olvides integrar elementos que contengan propiedades benéficas.
Por ejemplo, las semillas de chía son ricas en omega-3, esto previene las arrugas prematuras y la resequedad. El pepino tiene la función de depurar e hidratar la piel. Por su parte, la cúrcuma desinflama la dermis y hace que luzca más tersa.
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#24 ¡Desmaquíllate!
Este es otro consejo que seguro ya has escuchado en muchas ocasiones. Pero de nada sirve si sigues acostándote a dormir con el maquillaje puesto.
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El maquillaje evita que los poros respiren durante la noche y tu piel será incapaz de regenerarse. Si no lo retiras correctamente, puede causar irritaciones y acumulación de bacterias.
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Para que todo sea mucho más sencillo, coloca tu agua micelar o el desmaquillante que uses a lado de tu cama. Así no olvidarás hacerlo y no te dará flojera.
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