La aromaterapia es sin duda un recurso que ha quedado un poco en el olvido actualmente. Pero lo cierto es que es tan simple como tomar un baño, por eso, es una terapia que nunca debes descartar. De echo, muchos de los productos que utilizamos a diario contienen todo tipo de plantas, y por eso, ¿porqué no optar por un método más relajante y natural?
Belleza a lo natural: Aromaterapia

Las propiedades curativas de las plantas están hoy en plena vigencia. Y es que entre tanto químico un poco de naturalidad nunca viene mal. Sus aromas tiene el poder de relajar, estimular y sanar cuerpo y alma, ya que el olfato se conecta con el sistema límbico cerebral, donde se registran las emociones y la memoria. Para un verdadera sesión de belleza y relajación en tu propia casa hoy te contamos que debes saber sobre cada planta.


Calédunla: Hay unas 20 especies de caléndulas, que florecen durante todo el año en la región mediterránea. En aromaterapia se utilizan los pétalos de sus flores, amarillas o anaranjadas.
Para qué sirve: Es un desinfectante en cualquier dermatitis, además de hidratar en profundidad. también cicatriza y reduce la inflamación, lo cual es ideal para atenuar las varices.
Eucaliptus: El árbol de eucalipto es originario de Australia y se desarrolla en las regiones cálidas y también en los bosques húmedos. Sus hojas, de intenso aroma, tienen propiedades terapéuticas.
Para qué sirve: Descongestiona y estimula. Alivia los procesos gripales y los resfriados, pues despeja las vías respiratorias, y es antiséptico. Es muy adecuado para las pieles normales a grasas.
Lavanda: La lavanda se extrae de las hojas y flores del espliego, que crece especialmente en los terrenos rocosos de la región mediterránea.
Para qué sirve: Calmante y relajante, es muy indicada cuando se padece de insomnio y estado de estrés. También tiene efecto analgésico, antibacteriano, antiflamatorio y cicatrizante. Puede aplicarse en todos los tipos de piel.









