A diario, estamos rodeadas de cosméticos artificiales que pueden dañar nuestra piel, pero en el afán desesperado de vernos mejor terminamos acudiendo a ellos.
7 consejos para una buena transición hacia los tratamientos de belleza naturales
Por:Univision
Pero, ¡debes saber que cuentas con otras alternativas! De hecho, puedes adoptar una rutina de belleza natural para así canalizar todo el gran poder de la naturaleza a tu favor.
1. Analiza los productos que ya tienes
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La mayoría de los productos que utilizamos contienen sulfatos y parabenos, químicos que no solo dañan nuestro cuerpo, sino también el medio ambiente.
¿Cuál es nuestra recomendación? Analiza los productos de belleza que ya compraste y detecta cuáles son los que contienen estos componentes. Luego... ¡no los vuelvas a comprar!
2. Lee las etiquetas
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Sé que no es la lectura más atractiva del planeta, pero es muy útil. Antes de comprar cualquier producto, debes saber cuáles son los ingredientes que pondrás en tu cuerpo.
Las etiquetas pueden tener colores muy naturales y atractivos, pero no te dejes engañar: los ingredientes no mienten.
3. Debes aprender
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Procura eliminar los productos que contengan los siguientes ingredientes:
- componentes que terminen en el sufijo "-parabenos"
- sulfatos
- ftalatos (también escritos como "fragancias")
4. No des por sentado
Asumir que tus productos son naturales solo por su aspecto puede llevarte a cometer grandes errores. Debes tener en cuenta que la mayoría de los productos de belleza que utilizas necesitan conservantes e ingredientes especiales para preservarse.
Lee la letra pequeña y presta atención: aunque algo se llame “aceite natural del árbol de coco” no significa que sea natural.
5. Haz tus compras de forma inteligente
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En el momento que comienzas a prestarles atención a estos detalles, todo se vuelve más sencillo, porque sabes qué tipo de productos necesitas.
Ten presente que siempre te encontrarás primero con las alternativas más costosas, pero pierde cuidado que, en la medida en que vayas insertándote en el mundo de lo natural, encontrarás lo que necesitas a precios más justos.
6. Sé realista
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El pasaje hacia lo natural debe ser paulatino: no pretendas hacer en días lo que no hiciste en años. Por otro lado, este cambio tampoco debe ser radical; procura evitar los extremismos: no te sientas mal por usar un gel de baño artificial y no juzgues a tus amigas por usar un labial compuesto por una infinidad de químicos.
7. La clave es probar
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No permitas que la ansiedad te gane la partida: busca, prueba, busca y prueba hasta encontrar el producto que más se ajuste a tus necesidades.
Elijamos una vida más natural y disfrutemos de todos los beneficios que nos regala la naturaleza. Seamos más conscientes de lo que aplicamos en nuestro cuerpo, pero no caigamos en radicalismos. Ya lo sabes, pero nunca está de más repetirlo: los excesos nunca conducen a buen puerto.
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