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5 hábitos de belleza de los 90 que eran malos para nuestra salud

¿Eres un ser nostálgico? Entonces probablemente recuerdes con cariño todo lo que usaste en los 90. Pero por si no lo sabías, muchos hábitos de belleza que teníamos no eran para nada saludables. No lo sabíamos, claro, pero antes de recordarlo con tanto cariño piensa que aquel brillo que amabas ponerte en tu rostro podría haberte causado graves problemas...

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1. Rizado extremo del cabello

Todas las mañanas el ritual era el mismo: hacerse un perfecto rizado. Aunque amaras ese look, deberías saber que a la larga tenía un gran impacto en la salud del cabello. La exposición excesiva de calor lo deshidrata y lo hace más frágil. Por suerte hoy podemos tener preciosos rizos con máquinas que no dañan nuestro cabello.

2. Cejas muy depiladas

Los años 90 tenían un hábito de belleza muy negado en nuestros días: la excesiva depilación de las cejas. Cuanto más delgadas, mejor. Desde Jessica Alba hasta Christina Aguilera, las cejas escasas eran tendencia. Muchos especialistas han advertido que una vez que los folículos pilosos se mueren, no vuelven a crecer. Y la forma de matarlos es sacándolos todo el tiempo. Más de una habituada a esta práctica probablemente esté pagando las consecuencias.

3. Ponerle brillo a todo

Los 90 se definieron por usar brillo en todo. Brillo en roll-on en las sombras para los ojos, en los esmaltes de uñas, en los labiales, etc. Pero tanto brillo esconde malas historias: una mujer perdió un ojo después de que las partículas del brillo cortaran su córnea. El precio de querer brillar…

4. La obsesión de las scrunchies

Las scrunchies eran las fieles compañeras de los 90. El accesorio más preciado por todas. Ir por la calle y ver a todas con el pelo atado y bien ajustado era algo normal. Pero es sabido que la cola de caballo no es para nada saludable, puede provocar dolores de cabeza, la pérdida gradual de cabello o su debilitamiento sobre todo si ese peinado se hace seguido.

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5. Los claritos al extremo

No se trata de claritos sutiles, sino de aquellos que eran llevados al extremo. Todo comenzó cuando las celebridades como Jennifer Aniston o Ginger Space comenzaron a teñir su cabello de esta manera. Y en cuanto al daño capilar está todo a la vista: el exceso de diversas tintas hará que el cabello sea más quebradizo y seco.

¿Demasiada nostalgia de los 90? Dejemos de lado aquella frase de que  todo tiempo pasado fue mejor, ¡este presente es maravilloso! (y no solo me refiero a la estética).