Nuevamente aparece el problema de la falta de espacio. Cada vez debemos ser más creativos a la hora de maximizar el poco espacio disponible que tenemos en casa. Como vimos anteriormente una de esas opciones es optar por ambientes con un doble propósito, por ejemplo, colocar el living y la oficina en el mismo espacio. Otra opción más accesible para aprovechar el espacio es elegir un sofá cama. De esa manera tendremos dos utilidades en un mismo lugar. Además, tampoco tendremos problemas con las visitas que se quedan a dormir.
Tips para elegir el mejor sofá cama

Te daremos algunos tips para que elijas un sofá. El requisito es que tenga mucho estilo durante el día y que, al mismo tiempo, sea muy confortable para dormir durante la noche. Dado que un sofá cama tiene este propósito doble prueba a abrirlo y poder probar qué tan cómodo es. ¿Se podrá descansar correctamente en él? Al mismo tiempo asegurate de que sea lo suficientemente mullido (o que por lo menos te resulte cómodo) para utilizarlo como sofá.
Prueba a abrir el sofácama y cerrarlo de nuevo. Ten en cuenta que es algo que deberás hacer a la hora de utilizarlo. Probablemente no quieras tener problemas cuando tus invitados estén presentes. Si quieres que el espacio rinda todavía más opta por un sofá cama que incluya un lugar especial para guardar artículos. Será ideal para guardar las sábanas, mantas y almohadas mientras que no están en eso.
Si tienes la suerte de tener una casa de dos pisos y piensas colocar el sofá cama allí calcula qué tan complicado será poder trasladarlo hasta arriba. Generalmente los sofá camas son bastante pesados. Además, asegurate de que podrás colocar el sofá cama en la habitación que deseas.
Otra opción a la hora de acomodar a los visitantes durante la noche es colocar un colchón con una manta. De esa manera evitarás todas las complicaciones propias de un sofá cama. Arreglalo con una variedad de almohadones y lucirá perfecto.




