7 razones por las que no le debes quitar las garras a tu gato
La controversial técnica declawing, o quitarle las garras a los gatos, es un acto que desde mi punto de vista no le debes practicar a tu mascota. Veamos por qué.
#7 No es una manicura
Es una cirugía dolorosa y peligrosa. Se trata de amputar el último hueso de cada dedo del gato. Si fuera en los humanos, sería como cortar los dedos en la altura del último nudillo.
#6 Es una cirugía innecesaria
Amputar las garras de un gato no le trae ningún beneficio al minino, sólo trastorno y dolor. Lo realizan dueños de gatos que no lo supieron educar y no soportan arañazos en sus cosas.
#5 Arañar es necesario para los gatos
Si amputas las garras de tu gato, le robarás parte importante y necesaria de su vida. Los gatos no arañan por maldad, sino para estirarse, hacer ejercicio, disfrutar de si mismos y afilar sus uñas. Es un gato. Es así.
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#4 Le quitas su principal defensa
Imagina si tu gato sale al exterior y se encuentra con un par territorial. El desenlace de la historia puede ser tremendo si tu gato no tiene garras para defenderse.
#3 Muchos países lo prohíben
Más de 20 países, entre los que se incluyen Australia, Inglaterra y Japón, prohíben estas prácticas. Incluso muchos veterinarios de los demás países se niegan a hacerlo.
#2 Puede volverse más agresivo
Mucha gente piensa que con quitarle las garras se terminan los problemas de agresión, pero solo se acentúan, y llevan al gato a defenderse mordiendo.
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#1 Hay otras maneras de hacer que tu gato no arañe
Esta es una razón de peso para que decidas no amputar las uñas de tu gato, en conjunto con las demás. Lo mejor que puede hacerse es entrenar al gato desde pequeño para que no arañe tus muebles, pero si ya lo hace, es porque algo anda mal. Dispersa postes de rasguño por toda la casa, y no solo tengas uno en la sala. Necesita varios sitios en donde sí le permitas rasguñar. Prueba con variedad de materiales, como alfombra, sisal, cartón y madera.
Otra opción es colocarle tapones de goma o plástico en las uñas, que deben cambiarse cada 6 semanas. Pregunta a tu veterinario para que te cuente sobre ellos. Además, nunca olvides que a los gatos se le pueden cortar las uñas, tal como a los perros, así que si no lo estás haciendo, consulta con tu veterinario.
¿Pensaste alguna vez en quitarle las garras a tu gato? ¿El declawing es una opción para ti?