Gritos, empujones, selfies, poses, caras de angustia... El ambiente fue como el que viven los espectadores antes y después de una pelea de boxeo. Los periodistas y admiradores de la pareja presenciaron en el juzgado 12 de la Ciudad de México el encuentro entre Julián Gil y Marjorie de Sousa, donde debatieron ante una jueza de familia cómo serían las relaciones paternofiliales y a cuánto ascenderá la cuota de manutención mensual que Gil debe darle a Matías Gregorio, su hijo.