Una de las grandes críticas a la industria de los cómics es el alto precio que tienen, sobre todo en los mercados fuera de Estados Unidos y determinados países europeos. En América Latina los precios de los cómics son muy elevados, y las causas de esto no se terminan de entender del todo.
¿Por qué son tan costosos los cómics en Latinoamérica?


Dependiendo del sello editorial se nos dirá que es por los costos de producción, que es por el precio del transporte, que por la calidad de la tinta, que el papel y muchas otras cosas. Lo cierto es que la industria del cómic tradicional está en un punto de inflexión, con clientes cada vez menos dispuestos a pagar grandes sumas de dinero por un tipo de entretenimiento que en algunos números cortos, se acaba en apenas 15 minutos, y que encima debe poder competir con otras formas de entretenimiento.
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El cómic versus otros medios
El cómic no está en su momento de mayor popularidad. Como medio visual para contar historias de fantasía ha sido desplazado en gran medida por la televisión e Internet. Y si bien la audiencia a la que apuntan es diferente, hoy el precio de los cómics está fuertemente influenciado por el tipo de consumo que tiene el producto, muy particularmente los cómics extranjeros que se venden en América Latina.
Para poder funcionar, generar ganancias y movilizar el mercado las editoriales como DC Comics y Marvel han debido modificar sus esquemas de lanzamiento y plataformas. Hoy las propuestas de cómics digitales tienen cada vez más seguidores. Se trata de atraer lectores hacia el mundo electrónico gastando menos papel y tinta, con lo que se dejan esas ediciones en formato físico para compradores especiales que desean fuertemente contar con una versión física de su cómic favorito. No es raro que se piense que hoy en día los formatos impresos son prácticamente elementos de coleccionistas.
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El costo del cómic
Justificar los elevados precios del cómic en América Latina es casi imposible si hacemos una relación entre el dinero gastado y el tiempo de ocio que ofrecen. Pensemos en los lectores que se detienen cuadro por cuadro a leer y disfrutar de cada dibujo del cómic que han comprado. Seguro que ellos han hecho valer más su dinero al incrementar el tiempo de lectura en casi un triple. Pero en el cómic actual hay mucho relleno, y en esos casos estamos pagando un precio que ronda entre los 64 y 80 pesos mexicanos (aproximadamente entre 4 y 5 dólares estadounidenses), por un entretenimiento de apenas 15 minutos. Esto desde un punto de vista que más o menos puede medirse, porque si nos ponemos a hablar de calidad y gustos las variables se nos pueden ir de las manos.
Los cómics de edición nacional siempre son más baratos en los países latinoamericanos (seas del país que seas), pero su calidad deja mucho que desear si eres un obsesionado por los detalles y la colección. Si bien existen muy buenos cómics latinos, es obvio que no son los más populares. En cambio, los números y colecciones que nos llegan desde los Estados Unidos son más caros porque tienen que viajar muchos kilómetros en aviones y barcos, gasto que termina por incluirse en el precio de tapa.
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Pero... ¿existen soluciones para esta problemática?
La mejor solución para ayudar a reducir los precios de los cómics en América Latina sería que todos los números tuvieran producciones nacionales, o que incluso las propias editoriales extranjeras realizaran ediciones en los países latinos (algo que ha sucedido con ciertas intermitencias en mercados grandes como México o Argentina). Claro que habría que mejorar la calidad de las producciones nacionales para hacerlas más atractivas y competitivas con los cómics norteamericanos, para que los lectores tengan ganas de comprar estas unidades "nativas".
Se trata de una eterna y muy importante discusión en el mercado de la industria del cómic, tan inserta en el modelo capitalista que se rige por la maximización de ganancias frente a la reducción de costos de producción. Mientras tanto, muchos de los lectores quedamos de rehenes de las decisiones de los directores ejecutivos.
- Ver también: Marvel App: beneficios de leer cómics digitales









