Homenajeamos a John Byrne: un artista que dejó huella en el mundo del cómic

En el amplio mundo de los cómics norteamericanos de superhéroes existe una planilla con un puñado de artistas (entre los que se encuentran dibujantes, guionistas, entintadores o editores) que han dejado su enorme huella tras haber marcado la diferencia realizando trabajos excepcionales. Una de las filas de esa planilla pertenece a John Byrne.

Byrne nació en 1950 en Inglaterra aunque vivió su infancia en Canadá y de adulto se mudó a Estados Unidos. Su primer contacto con los cómics lo tuvo gracias a las historietas de DC y series de televisión de Superman y Superboy aún cuando no sabía leer, pero sus primeras influencias llegaron cuando tenía 12 años al leer números de Fantastic Four y Spider-Man de Marvel.

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A pesar de que ya dibujaba bocetos desde niño, Stan Lee, Jack Kirby y el estilo naturalista de Neal Adams fascinaron a John y lo llevaron a inscribirse en la Alberta College of Art and Design canadiense, pero abandonó en 1973 y se dedicó a trabajar en pequeños pedidos y como freelancer para Charlton Comics.

En 1975, tras haber vendido una pequeña historia a Marvel Comics, comenzó a trabajar más frecuentemente con la editorial gracias a su relación con el escritor Chris Claremont. Byrne no tardó en convertirse en un artista en crecimiento constante, pasando de X-Men a Uncanny X-Men, trabajando en títulos fundamentales como Days of future past y creando personajes como Proteus y el grupo Alpha Flight.

Al mismo tiempo formaba equipo con David Michelinie en The Avengers y hasta se dio el lujo de co-crear Ant-Man. Posteriormente se dedicó a la serie de Fantastic Four, Incredible Hulk y Alpha Flight.

Su primera experiencia en DC Comics podría decirse que no fue del todo buena. Byrne siempre quiso dibujar a Batman y en 1980 le ofreció a la editorial realizar una miniserie especial. Tras haberlo acordado, DC le envió en forma demorada el guión de The Untold Legend of the Batman, por lo que Byrne informó que no podía continuar tras el primer número por compromisos que había adquirido con Marvel y debió irse.

El malentendido lo apartó de DC durante algunos años pero volvió para redimirse en la serie The Man of Steel, el gran reboot de Superman,  en 1986. También trabajó en Actions Comics, redefiniendo la figura del rostro del último hijo de Kriptón y en la saga Legends.

Durante ese tiempo no dejó de hacer dibujos para Marvel. Su arte puede verse en Star Brand, West Coast Avengers, She-Hulk, Namor y Iron Man.

Durante los 90, en pleno auge de los artistas independizados en editoriales como Image, Byrne realizó algunos proyectos para Dark Horse como Next Men, Babe y Danger Unlimited. Otros que siguieron sus pasos fueron Frank Miller y Mike Mignola.

En adelante continuó realizando proyectos (dibujando, escribiendo o ambos) que le resultaran atractivos como en Wonder Woman, Green Lantern, Spider-Man, Superman & Batman, X-Men y JLA. Además se dio el lujo de producir para IDW con total libertad.

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John Byrne forma parte del grupo esencial de dibujantes al que debe tomarse en cuenta a la hora de aprender este arte. Desde que inició su carrera ha recibido numerosos premios y al día de hoy sigue siendo reconocido.

Algunos proyectos de John Byrne recomendados para leer:

• Su época en Fantastic Four. Fue definida como la nueva “golden age”.
• El reinicio de Superman en The Man of Steel.
• El suceso a finales de los 70 de The Uncanny X-Men.
• Los 18 primeros números de Doom Patrol v4.

Algunas de las creaciones más importantes de John Byrne:

• Guardian y el grupo Alpha Flight.
• Shaman durante los X-Men.
• Hellfire Club en 1980.
• Bishop en Uncanny X-Men.
• El grupo Next Men.
• El popular Ant-Man.
• Sasquatch de Alpha Flight.

¿A qué artistas crees que influenció John Byrne?